Kanala: La calidad de un buen menú

Llegué al Restaurante Kanala siguiendo la pista de la campaña que puso en marcha Turismo de Debabarrena y donde 7 restaurantes de la comarca ofrecían unos menús degustación, para que el público pudiera conocer las bondades gastronómicas de esta zona guipuzcoana. Aterricé en el Kanala un miércoles, la idea, disfrutar de ese menú degustación, pero, el no leer la letra pequeña de que el menú había que pedirlo a la hora de llamar para reservar, cosa que no hice, llevó consigo que me tuviera que conformar con disfrutar de su menú del día. ¡Y vaya menú del día!

Empezar a buscar entre las propuestas de aquel día y decidí empezar con una ensalada de anchoas marinadas, en plena época, día de calor, algo fresquito para empezar. A veces el menos es más, la magia de la sencillez. Una buena lechuga de fondo, unos tomates cherrys y encima una buena ración de anchoas marinadas en casa, manteniendo su carácter y personalidad, frescura en la boca, una delicia. Y, para el segundo plato, me lancé a la piscina, vi que ofrecían chuleta, con un suplemento al menú, y aposté a lo grande. Una chuleta de ración, para quedarme más que satisfecho, una buena chuleta, tierna y con sabor, te la sirven sobre un plato caliente, por si quieres darle un punto más de cocción. Acompañada de una buena ración de patatas, me quedé muy feliz con la elección. Para terminar, como postre en aquella primera visita, un flan de huevo, sin trampa ni cartón, un flan de verdad. Rápidamente se me olvidó mi «error» y descubrí un restaurante donde la calidad y el precio se dan la mano en este menú del día para nuestro placer.

A las dos semanas volví, por invitación de Marian García y Alberto Sánchez, los responsables del restaurante. Volví a corroborar que el menú del día del Restaurante Kanala es de muy a tener en cuenta si Itziar os pilla en vuestros trayectos. En esta segunda visita, aposté por la sopa de pescado. En aquella primera visita, ya me sorprendió encontrarlo entre las propuestas, y, al ver que se mantenía decidí empezar con un plato de cuchara. Te ponen un cuenco en la mesa y dejan que te sirvas tú mismo. La receta es reflejo de la trayectoria de Alberto, lo aprendido, las versiones vistas, las ha ido adaptando hasta conseguir esta sopa de pescado que es un auténtico manjar, una de las grandes estrellas de la oferta gastronómica del Kanala. Una sopa cuajadita, casi más una crema que sopa, con sus tropezones del mar. Disfruté cada bocado, cada cucharada, y, no terminé el cuenco porque me dio un poco de vergüenza, todo sea dicho, y así se lo transmití a ellos, que me pareció una muy buena sopa.

De segundo plato, opté por el magret de pato, hacía tiempo que no comía este producto y me llamó la atención que viniera acompañado de una crema de setas y hongos y puré de manzana reineta. Una buena combinación, y, muestra de la calidad del producto con el que trabajan en la cocina del Restaurante Kanala. El postre me sorprendió mucho, soy muy aficionado de la crema catalana, y, al leerlo entre los postres, no tuve dudas. Pero, su apuesta es por una crema, elaborada en casa, faltaría más, pero, más ligera de lo que suele ser habitual, lo que le aporta frescor al plato, y, se convierte en un buen postre. Que no se me olvide el detalle que ofrecen al inicio de la experiencia, un pequeño aperitivo para hacer más agradable la espera del primer plato.

Marian García y Alberto Sánchez se hicieron cargo del Restaurante Kanala, y, con ello, también del hotel con 12 habitaciones, en julio del 2019, 8 meses antes de que llegara la pandemia. Se sumó su hijo Gorka a la aventura, y, aprovecharon la pandemia para ir renovando el hotel con sus propias manos. Dos profesionales con una amplia experiencia en el mundo de la hostelería. Alberto, pasó por los fogones de Casa Alcalde, los hoteles María Cristina, Londres e Igueldo, antes de escaparse a Madrid y Gijón, y volver a Donostia para hacerse cargo durante 10 años del Zelai Txiki, junto a Marian, que aterrizó en las faldas de Ulia tras su experiencia en Katxiña Txakolindegia, el Tenis de Ondarreta y Bokado.

El menú del día lo cambian diariamente, aunque hay platos como la sopa de pescado, que son fijos. 4 primeros y 4 segundos platos a elegir al precio de 24 euros se convierte en una muy buena manera de acercarse a la cocina del Restaurante Kanala. Y, si no, siempre nos queda la carta, una carta creada en torno a una cocina tradicional, cediendo el protagonismo a los productos y a la parrilla. Una cocina casera, donde Alberto ofrece su visión y perspectiva de nuestra tradición culinaria, de nuestras recetas de toda la vida. Una referencia gastronómica en Debabarrena, eso es el Restaurante Kanala. On egin!