Elkarrekin Podemos tiene la llave de la alcaldía en cuatro localidades de peso en Gipuzkoa

Vayamos primero con las certezas. En principio no se prevén sorpresas en la mayor parte de los municipios dado que, por un lado, el pacto alcanzado entre PNV y PSE garantiza el apoyo mutuo allí donde sea necesario –10 localidades– y, por otro, EH Bildu cuenta con mayoría absoluta en 48 municipios.

El pacto entre PNV y PSE consiste en apoyarse de forma recíproca, es decir, allí donde los jeltzales hayan logrado más papeletas en las urnas el candidato a alcalde sería votado por los socialistas y viceversa. Este apoyo conllevaría posicionarse a favor o también en blanco, si esta papeleta sirve igualmente para favorecer la elección. Si se cumple el acuerdo, algo que han confirmado por activa y por pasiva los máximos dirigentes de ambas formaciones, los dos partidos blindan las mayorías en diez localidades.

En virtud de este pacto el PNV se beneficiará del apoyo del PSE para acceder a las alcaldías de Donostia, Elgoibar, Legazpi, Urnieta, Urretxu y Zarautz. En otras tres, Aia, Beasain y Lazkao, no hará falta al contar los jeltzales con mayoría absoluta.

Por su parte los socialistas sumarán los votos del PNV para liderar los ayuntamientos de Eibar, Irun, Lasarte-Oria y Zumarraga. Cuentan con mayoría absoluta en Larraul.

¿Podría producirse alguna sorpresa en este pacto? Todo indica que no, pero en otras ocasiones las ha habido. Por recordar solo una de ellas, cabe remontarse a 2015 cuando la abstención de un concejal independiente del PNV permitió que EH Bildu mantuviera la alcaldía de Andoain en detrimento del PSE.

Por lo que respecta a EH Bildu, gobernará en más de la mitad de los municipios guipuzcoanos, en concreto, en 48 de los 88 existentes en el territorio. El 28-M obtuvo la mayoría absoluta en localidades de la importancia de Hernani, Tolosa, Oiartzun, Usurbil, Azpeitia, Orio, Oñati y Getaria. En todas ellas, por tanto, el pleno del sábado será un camino de rosas.

Además, podría sumar otros cinco muy relevantes dependiendo de la posición que adopte Elkarrekin Podemos. Como hemos señalado anteriormente, los morados pueden inclinar la balanza hacia la coalición independentista en Pasaia, Arrasate, Errenteria y Ordizia. En esos cuatro municipios, la suma de EH Bildu y Podemos supera a la de PNV y PSE.

Los morados todavía no han decidido el sentido de su voto. Fuentes del partido señalaron ayer a DV que la prioridad es apoyar a formaciones «progresistas y de izquierdas», aunque no aclararon si se referían a EH Bildu. «Todavía quedan tres días y estamos negociando municipio a municipio porque la idiosincrasia de cada uno de ellos es distinta. También estamos viendo en cuáles podríamos entrar a formar parte del gobierno», señalaron desde la formación.

Desde EH Bildu, sin embargo, este apoyo se da por hecho. Al menos la candidata a diputada general, Maddalen Iriarte, agradeció las declaraciones de Miren Echeveste, aspirante de Podemos al mismo cargo, en las que anunció que promoverá «gobiernos progresistas».

También está abierto el escenario en Hondarribia y Azkoitia. En la primera, el 28-M se saldó con la victoria de la plataforma Abotsanitz que cuenta con 7 ediles, frente a 8 de PNV-PSE. En este caso EH Bildu tiene la llave con dos ediles. En Azkoitia ganó el PNV, pero todo depende de la postura de Azkoitia Bai Elkarrekin.

Una tercera plataforma también resulta determinante, en este caso en Deba, para deshacer el empate a seis ediles entre EH Bildu y el PNV. Finalmente, Orain Deba anunció ayer que apoyará al PNV.