«Quiero romper la dinámica de que se vote al PNV para que no venga EH Bildu»

- Usted se presenta como candidato de un partido en sus horas más bajas. ¿Qué va a hacer para revertir la situación?

- El gran logro del PNV es hacernos creer que el tablero político es inmutable y que nos tenemos que conformar con el mal menor: o ellos o EH Bildu. Esto no es así y quiero romper esa dinámica. En 2011 sacamos un concejal más que el PNV. No hace falta remontarse a los años noventa para comprobar la relevancia del PP en la ciudad. En realidad, el papel que ha mantenido el PNV frente a Bildu lo teníamos que haber asumido nosotros, algo que no hemos conseguido por errores propios y aciertos ajenos. Una gran parte de los donostiarras ya empiezan a ver en el PP una alternativa al nacionalismo obligatorio.

- El PP tiene 3 concejales. ¿Cuál es su aspiración para el 28-M?

- En 2011 conseguimos 16.000 votos, en 2015 fueron 9.000 y en 2019 algo más de 10.000. Hemos perdido 6.000 desde 2011, luego hay mucho margen de mejora. Si le dijera que mi objetivo es ganar las elecciones, usted me diría que vivo en Marte... Me presento para obtener el mejor resultado posible. Mi objetivo es ser alcalde de San Sebastián. Si no lo consigo en 2023 lo lograré en 2027. Para ello necesito, como en su día hizo Gregorio Ordóñez, desarrollar un proyecto posibilista, con cara y ojos, en el que la gente crea.

- ¿Por qué han perdido esos 6.000 votos?

- En 2011 nos presentamos en una situación de debilidad interna. El contexto nacional también nos perjudicó, con casos de corrupción incluidos. La situación ahora es completamente distinta. El partido está fuerte y hemos realizado una oposición sólida. Podemos asentar una alternativa y un proyecto ganador.

- ¿El 'efecto Feijóo', quizá un tanto diluido, jugará a su favor?

- Beneficiará al partido en toda España, pero no nos podemos colgar de él, hay que trabajar cada uno es su municipio. Aquí el responsable del resultado, para bien y para mal, seré yo.

- Ha citado a Gregorio Ordóñez a quien, por edad, no conoció. Se cumplen ahora 28 años de su asesinato. El tiempo ha pasado, pero ha tomado nota de su legado

- Para preparar las elecciones de 2019 nos fijamos mucho en su trabajo. Buceé en los archivos de la fundación, leí entrevistas... Copiamos muchas de las iniciativas que llevó a cabo en sus campañas. El mensaje txuri urdin de Ordóñez es el que he tratado de articular estos años.

- Yendo a los temas de gestión, la carestía de la vivienda está expulsando a los jóvenes. ¿Cuál es su propuesta?

- Llevamos cuarenta años 'regalando' viviendas de protección oficial para que al final se vendan en el mercado a 600.000 euros. Planteamos crear viviendas dotacionales en donde los jóvenes vivan de manera temporal y puedan emanciparse. No puede ser que, por ejemplo, Auditz Akular sea un descampado.

- ¿Apuesta por más o menos VPO?

- Lo ideal es que fueran de alquiler.

- ¿Está a favor de prohibir la construcción de hoteles en las zonas saturadas?

- Donde ya hay muchos hoteles el propio sector se da cuenta de que no caben más. No obstante, en las zonas saturadas no me parece mal que haya cierta regulación.

- ¿Es partidario de cobrar una tasa turística a los visitantes?

- Estoy en contra, pero podría llegar a aceptarla siempre que los ingresos se destinen a beneficiar a los donostiarras y no al Ayuntamiento. Si se usa para mejorar el mantenimiento o crear apartamentos dotacionales estaría bien, pero no para sufragar el gasto corriente y la contratación de más personal o abrir oficinitas de no sé qué.

- ¿Daría más licencias para la apertura o ampliación de grandes centros comerciales?

- No, porque uno de los principales motores económicos es el pequeño comercio. Si no apostamos por él, San Sebastián se va ir pareciendo a cualquier otro lugar. Además, es un atractivo para el turismo. Los visitantes no volverán si ven lo mismo en Donostia, Barcelona o Toledo.

- El tráfico en el centro se ha convertido en un problema. ¿Qué alternativas ofrece?

- Lo han hecho todo mal, por sus narices y sin escuchar a nadie. Lo primero que haría es revertir los cambios de sentido de las calles Urbieta y San Martín, además de estudiar qué se puede hacer con el tramo del Buen Pastor porque debido al enorme agujero que hay debajo quizá ni siquiera sea posible abrirlo al transporte público.

- ¿Bajaría, subiría o mantendría los impuestos?

- El proyecto de Presupuestos del Ayuntamiento asciende a 462 millones de euros, un 8% superior al del año pasado. Si comparamos con 2015, son 104 millones más para ofrecer los mismos servicios a la misma población. Una familia de cuatro miembros está pagando ahora de media 2.400 euros más de impuestos municipales que en 2015. Imagínese lo que haría cada familia con ese dinero en su bolsillo.

- Por tanto, bajaría impuestos.

- Así es. Si fuera alcalde encargaría una auditoría para ver dónde se va el dinero. Es la ciudad de España que más impuestos paga por habitante. ¿Dónde se va ese dinero? La partida más cuantiosa es la de gastos de personal. Si estás en una situación complicada por la pandemia, la inflación y demás, ¿por qué sigues contratando personal? El segundo capítulo que más chupa del Presupuesto es el gasto corriente.

- ¿Le parece que Donostia es una ciudad segura, a la vista de los acontecimientos trágicos que se están produciendo, con un joven recientemente muerto por navajazos?

- He visitado el 70% de los comercios y ya en el primero me transmitieron su preocupación por la seguridad. Esa sensación se fue repitiendo en la mayoría de ellos. Ves que los vecinos de Egia se rebelan, surgen problemas en la plaza Easo, en el distrito Este no para de haber jaleos, en Aiete entran en viviendas... Hay un problema de seguridad creciente. Lo veníamos denunciando hace tiempo y nos llamaban alarmistas.

- ¿Qué soluciones propone?

- En el último pleno sobre el estado de la ciudad propusimos un pacto por la seguridad y, como era de esperar, votaron en contra. Planteábamos dotar a la Guardia Municipal de los recursos necesarios. San Sebastián, una ciudad de 189.000 habitantes, dispone como máximo de cinco patrullas activas a la vez. Así es imposible ejercer un control eficaz.

- ¿Cómo se controla que haya personas que salgan a la calle con navajas?

- Es imposible registrar los bolsillos de toda la gente. Me negaría a realizar controles aleatorios por la ciudad, no estamos en un Estado policial. Ahora bien, todos sabemos que las noches del viernes y del sábado hay cuatro o cinco puntos calientes. Esos lugares sí se deben vigilar, pero para ello hacen falta recursos.