«No permitiré que Bildu meta la mano en la cartera a las clases medias», avisa Pradales

Pradales sacó así a la palestra toda una serie de medidas ligadas a la vivienda. Entre ellas, una línea de avales públicos con 200 millones de euros para facilitar la financiación del 20% que los bancos no cubren; elevar el límite de ingresos a 30.000 euros por persona para acceder a ayudas, así como la construcción de 7.000 viviendas en régimen de alquiler, de las cuales un 40% estarán destinadas a menores de 36 años.

Pradales aprovechó entonces para cargar directamente contra EH Bildu: «Vamos a defender a las más de 330.000 personas que se deducen hasta 1.950 euros por tener una cuenta vivienda o un préstamo hipotecario. ¡No vamos a permitir que EH Bildu meta la mano en la cartera a las clases medias y trabajadoras de este país!», se comprometió, haciendo así referencia al planteamiento de la coalición soberanista de eliminar la desgravación fiscal por la compra de vivienda habitual para fomentar el alquiler.

El candidato jeltzale también puso el foco en el empleo de calidad. «La gente joven merece buenos trabajos, buenos sueldos, desarrollo profesional y facilidades para la conciliación familiar y personal», defendió Pradales. Además, hizo una apuesta férrea por retener y atraer el talento. «Las personas jóvenes deben poder elegir en libertad y para ello debemos ofrecerles buenas condiciones de trabajo; y debemos aprovechar nuestras ventajas para atraer los perfiles que nos interesan», argumentó Pradales, que planteó poner en marcha una Agencia Vasca del Talento «para cuidar el talento vasco y atraer talento del resto del mundo». «Apoyaremos a las empresas para atraer profesionales a Euskadi y también haremos un esfuerzo especial por atraer profesionales sanitarios a Osakidetza de otras partes del Estado y del mundo con un plan de incentivos económicos y laborales», se comprometió.

Tejeria, por su parte, hizo un llamamiento a la movilización para que la gente acuda a las urnas el 21-A y resaltó que «frente a las palabras grandilocuentes vacías de contenido», los jeltzales ponen sobre la mesa «iniciativas concretas y realistas», como los 1.250 millones de inversión en Osakidetza o el fondo de 3.000 millones para el arraigo industrial.

Egibar, por su parte, defendió que un proyecto abertzale «tiene que tener en cuenta a todos los ciudadanos con todos sus derechos, también los políticos» y resaltó que «los valores comunitarios son los que dan sentido a nuestro proyecto, no el individualismo». El presidente del GBB pidió a los guipuzcoanos que sean «críticos y exigentes», pero que den su apoyo al PNV el 21-A para poder «llevar Euskadi adelante».