Las listas de la discordia
El foco ·
El PP vasco vive sus momentos más convulsos después del desgarrador desenlace que provocó el pulso mantenido durante meses entre Casado y Alonso, que se ... saldó con el exministro de Sanidad regresando a su casa y aguantando como podía las lágrimas de sus ojos.
El partido en Euskadi, cada vez más escuálido en su estructura y electorado, está soportando como puede un embate de colosales dimensiones y los verdaderos daños se cuantificarán el 5 de abril. Dirigentes y militantes viven estos días en la confusión desde que el 23-F la dirección de Génova dio todo un golpe de mano y derrocó a Alonso para proclamar a Iturgaiz, un 'sangilista' confeso que semanas antes había apoyado públicamente en una junta directiva al exalcalde de Vitoria. A partir de ahí todo se ha desarrollado a una velocidad vertiginosa y con evidentes errores de bulto.
La elaboración de las listas, como no podía ser de otra manera, ha generado malestar en diferentes sectores del PP vasco porque sencillamente se han completado con una urgencia que ha impedido coser las costuras que desde hace una semana se han soltado de forma abrupta. Resulta sorprendente que Amaya Fernández, antes secretaria general, y que ahora es presidenta del PP vasco en funciones, haya sido laminada de la candidatura vizcaína. Es la primera vez que un jefe de filas del PP vasco no está en las listas. Para avivar un poco estos rescoldos humeantes, la presidenta vizcaína ha querido argumentar su ausencia en que se respetaban los deseos de la propia Fernández, pero los 'alonsistas' se están aún revolviendo al negar esta versión. Y en Gipuzkoa, las frustraciones también se airean. Los 'casadistas' -con Arcauz a la cabeza- se han visto ninguneados por el propio Casado al premiar a la concejala irunesa Muriel Larrea, que transitaba por la calle de en medio. Ver para creer.
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