El buen comportamiento de febrero anticipa una recuperación del empleo en Gipuzkoa

En lo que respecta a la afiliación a la Seguridad Social, Gipuzkoa ha registrado en febrero 346 cotizantes más que el mes anterior, hasta alcanzar los 318.241. Un ligero aumento que también se ha producido en Bizkaia, no así en Álava, que se anota un mínimo descenso, que deja el conjunto de Euskadi con 888 afiliados más, hasta los 951.771. En el conjunto del Estado la cifra crece en 21.000, con lo que se queda a las puertas de los diecinueve millones de afiliados. Se trata en este caso del peor dato desde 2013.

Pero volviendo a nuestro territorio, las ramas de actividad que han tirado del empleo han sido la Educación, que gana 504 cotizantes, y la Industria, que suma 349. También añaden la construcción (111), la administración pública (134), las actividades profesionales (101), el transporte y almacenamiento (51) y en menor medida las actividades administrativas (21).

En el lado contrario, el comercio y la reparación de vehículos ha perdido solo en un mes 488 cotizantes, con lo que sigue su caída libre. También lo hace la hostelería, la gran damnificada de la pandemia, con 237 afiliados menos, y las actividades sanitarias, que restan 31.

El aumento de afiliados a la Seguridad Social ha conllevado un descenso en la cifra de parados. En el caso de Gipuzkoa, ha cerrado febrero con 576 desempleados menos, hasta dejar el total en 34.399. Euskadi reduce en 1.702 el número de personas registradas en Lanbide, hasta las 129.028. Sin embargo, en el conjunto del Estado aumenta la cifra de parados en 44.436, lo que sitúa la cifra total en poco más de cuatro millones. Un listón que no se rebasaba desde 2016.

Como es habitual, son los servicios los que registran un mayor descenso en nuestro territorio, con 482 parados menos, seguidos por la industria (-120) y la construcción (-59). La agricultura y el colectivo sin empleo anterior incrementan, sin embargo, el número de desempleados, con 5 y 80 más, respectivamente.

Respecto al mismo mes del año anterior la cifra de parados sube en 3.374 en nuestro territorio y en 11.789 en Euskadi. Una evolución lógica teniendo en cuenta que Gipuzkoa todavía cuenta con 7.176 cotizantes menos que hace un año. En el caso de Euskadi, aún le restan 21.381 para alcanzar las cifras prepandemia.

Patxi Sasigain, responsable de Competitividad e Innovación de Adegi, considera estos datos moderamente positivos, aunque destaca que «la fiesta va por barrios». Así, apunta que algunas actividades como la Administración pública, la Educación, la Sanidad o los servicios a empresas empezaron a remontar en el segundo semestre del año pasado y continúan con su buena evolución. Pero otros, añade, siguen estando todavía peor que hace un año aunque recuperan empleo, como son la industria, la construcción o la informática.

Sasigain considera que la economía va por el buen camino, aunque está estrangulada, dice, por las medidas anticovid. Y añade que hasta que sectores como la hostelería, los servicios personasles y de ocio puedan retomar su actividad habitual «no volveremos a la normalidad». Adegi prevé que Gipuzkoa cree este año entre 2.000 y 3.000 empleos, aunque todo estará a expensas de la evolución de la pandemia, destaca.

El viceconsejero de Empleo del Gobierno Vasco, Alfonso Gurpegui, también apunta en la misma línea y dice que, a pesar de que el año sigue siendo muy duro, se dan las circunstancias para empezar a recuperar empleo de calidad. Eso sí, destaca entre las sombras el aumento de perceptores de RGI en 850 personas, lo que indica que se están agotando, subraya, otros recursos de escudo social que han sido efectivos hasta el momento, sobre todo para desempleados de larga duración.

Los sindicatos ponen el acento, sin embargo, en estos desempleados que llevan más de dos años registrados en Lanbide, así como en los jóvenes y las mujeres, que son los que están pagando sobre todo, recalcan, la factura laboral de la pandemia. Así, entre otras cosas reclaman derogar la reforma laboral.