Los baserritarras levantan hoy el bloqueo en la frontera pero exigen soluciones este verano

Los baserritarras vascos prometieron en marzo, después de bloquear la frontera por primera vez pero tan solo durante unas horas, volver a movilizarse si no lograban que las instituciones respondieran a sus peticiones, y así lo están haciendo desde primera hora de la mañana de ayer desde el interior y costa de Gipuzkoa, el norte de Navarra e Iparralde.

Una pancarta negra de grandes dimensiones colocada por los agricultores vascofranceses sobre los arcos del peaje de Biriatou, en el que se puede ver escrito en francés 'Aquí empieza la resistencia de la agricultura europea', es el nexo de unión entre las más de 15 asociaciones convocantes de la protesta, liderada en este lado por Ataca (Treviño y Álava) y Bagea (Gipuzkoa). «Cerramos la frontera entre España y Francia las próximas 24 horas como medida de presión para forzar un diálogo en el Ministerio de Agricultura y con el comisario de Agricultura de la Unión Europea. Esperamos que podamos negociar un calendario preciso para resolver esta situación durante el verano. La situación en el sector es crítica, y si no se consiguen avances, volveremos a movilizarnos el 30 de octubre», señalaron los diferentes portavoces de las principales organizaciones durante el día de ayer.

Iñaki Martínez de Lagos, presidente de la asociación Ataca, leyó el manifiesto consensuado por las dieciséis organizaciones. «Pedimos más control a los productos importados y exigimos una mayor supervisión de los productos que entran en nuestro país para asegurar la calidad y la seguridad alimentaria, así como proteger nuestra producción de la competencia desleal». En esa misma línea, demandó «priorizar los productos locales y dar preferencia a los productos de proximidad, fomentando así la economía local reduciendo el impacto ambiental del transporte de alimentos y garantizar la frescura y calidad de los alimentos que llegan al consumidor».

Y segundo, en cuanto a la «reducción fiscal de las energías utilizadas para la producción de alimentos», proponen «la exención de los impuestos asociados a la energía (gas, electricidad e hidrocarburos) utilizada en el sector para reducir los costes y fomentar la productividad».

Martínez de Lagos puso en valor que «solo conjuntamente conseguiremos que tengan en cuenta nuestras reivindicaciones y esta acción coordinada no es una iniciativa aislada, sino el principio de una colaboración continuada que no se detendrá hasta conseguir cambios significativos en las políticas europeas».

Esa unión la quiso simbolizar Thierry Léon, del Movimiento Independiente Francés, y que también ha sido portavoz del mensaje que los baserritarras han querido expresar: «Es el principio de un movimiento más general en Europa al que esperemos que todos los países de Europa se unan. De Portugal a Polonia, de Grecia a Bélgica, todos los agricultores se ponen en marcha. No podemos esperar más y el campo necesita medidas fuertes para seguir trabajando y vivir».

Por último, el tercero en comparecer fue Joxean Etxeberria, de la guipuzcoana Bagea (Baserritar Gazte Elkartuen Auzolana), quien apuntó que «antes de marzo hablamos con los de Iparralde para poner en común las peticiones de cada uno y las unificamos para mostrar unidad ante las instituciones europeas. Queremos seguir negociando durante el verano y veremos qué pasa en octubre».

El primer sector guipuzcoano -también el vasco y el estatal- atraviesa desde hace años por una delicada situación, después de perder 3.500 explotaciones agroganaderas en la última década. Bizkaia lidera esta pérdida con 5.147 instalaciones menos en una década (-33%), mientras que en Álava existen 916 explotaciones menos que hace diez años (-15,9%). La suma de los tres territorios deja a Euskadi con 9.655 explotaciones menos (-26,9%).

Los convocantes pasaron la noche en Biriatou, y en otros puntos fronterizos como La Jonquera en Cataluña, y hoy volverán a hablar ante los medios. Ayer arrancaron a primera hora desde Tolosa y Zarautz hasta Astigarraga, y de ahí a Irun, lo que afectó al tráfico en vías como la N-1, la N-634 o la GI-636.