¿Noveno y último capítulo en París?

En un primer instante pareció que se refería a una posible retirada, pero cuando Nadal dio cuenta de los dolores que lleva soportando, especialmente los últimos años, lo que sucedía era que el tenista ganador de veintiún Grand Slam estaba siendo pragmático. «Ojalá pueda seguir viniendo muchos más años, pero soy consciente de que si las cosas no van bien, podría ser que fuese mi último partido en Roland Garros. Cuando termine mi carrera ya hablaremos para entender muchas más cosas (sobre su estado físico). Ya sabemos lo que hay. Ahora bien, lo que pueda pasar, no se sabe...». Sabedor de que su cuerpo puede decir basta en cualquier momento, Nadal saborea cada raquetazo que da en la pista que también puede considerar el jardín de su casa.

Djokovic ha sufrido en muchas ocasiones a su eterno rival en París, ya que de las ocho veces que se han enfrentado, en seis ha salido derrotado. Sin embargo, su recuerdo más reciente puede ser de los más felices de su carrera porque el año pasado logró un triunfo incontestable en semifinales (3-0) ante Nadal que le sirvió a la postre para hacerse con su segundo Roland Garros.

El serbio, un año más joven que Nadal, llega en mejor estado físico y más fresco tras haber ganado por 3-0 sus cuatro partidos. «Voy a intentar buscar todas las soluciones posibles para darme una oportunidad», dijo el balear antes de su posible último baile.