La Copa de Oro se queda en Donostia
Arizkorreta valora desde Madrid su triunfo dorado, pero admite que el trofeo permanece en casa de sus aitas «al ser el más especial»
Eran las 18:15 de ayer cuando Arizkorreta aterrizaba en su casa de Madrid «cansado, pero muy feliz». Las celebraciones por la victoria en la ... Copa de Oro no se alargaron mucho, aunque entre los suyos también hubo quien prolongó la cena y los festejos. Volvió a casa sin la Copa, que se quedó en Donostia, en casa de sus aitas. «Ellos guardan muchos trofeos de cuando era jockey, y éste, el más especial, quería que lo guardaran ellos». La emoción se le sube a la garganta cada vez que hace referencia a sus padres.
Guillermo es entrenador desde el año 2006 y va camino de ganar su décima estadística consecutiva. Desde 2012 es el preparador número uno en España. Licenciado Administración y Dirección de Empresas, se caracteriza por ser un hombre prudente y educado, un referente en cuanto a comportamiento. El pasado curso estableció, con 69, un nuevo récord de victorias en un año para un entrenador. Le faltaba la guinda dorada, que «para un donostiarra lo representa todo».
«Más que el éxito personal, lo que más me ilusiona es compartirlo con mi gente. Quería que me viesen ganar la Copa de Oro»
VAlor de la victoria
El lema en la cuadra de Guillermo es «la paciencia recompensa». Una máxima que le permite no perder nunca la compostura. Modesto en la victoria y sereno en la derrota. Nunca un mal gesto. A pesar de que se le recordaba que nunca había ganado la carrera de su casa, siempre sintió que su momento llegaría. «No me molestaba que me lo dijeseis. De entrada, porque tampoco llevo tantos años en la profesión, pero nunca llegué a agobiarme por no ganar la Copa de Oro».
La victoria del sábado permite a Guillermo brindar el éxito más deseado a Iñigo Gómez Pineda, líder de la estadística de propietarios, pero al que también le faltaba la Copa de Oro. «El objetivo del año para Iñigo era este. Él prioriza correr en San Sebastián porque siente un vínculo emocional muy fuerte con este hipódromo y esta ciudad desde su infancia. Para él no hay victoria mejor».
«La caída de Sanlúcar le ha condicionado bastante estos días, pero ha hecho un gran esfuerzo para poder montar»
Janácek
Completa el círculo el jinete checo Vaclav Janácek, el único que había saboreado las mieles del Oro. «Ha sido muy importante para él. La caída de Sanlúcar le ha condicionado bastante estos días, pero ha hecho un gran esfuerzo para poder montar». Acostumbrado a ganar la estadística, este año Sousa y Fayos le llevan ventaja, pero su entrenador sigue confiando en él: «en otoño seguro que se acerca a sus números».
El éxito no hubiese sido posible sin el principal protagonista: The Way of Bonnie, «un caballo con muy buena cabeza y fácil de entrenar. Su mayor virtud es el corazón que tiene; siempre se emplea y le gusta mucho competir». El golpe de calor que sufrió tras el premio Rheffissimo «fue un susto muy grande. Por eso, tras el GP de Madrid, lo más importante fue que no le volviera a pasar. De la Copa de Oro también se ha recuperado muy bien». Aunque todavía está matriculado para disputar el GP de San Sebastián, Arizkorreta prefiere no abusar de él. «Es muy poco probable que corra. Si no vamos a Francia, el siguiente paso es el Memorial».
«No me molestaba que lo dijeseis, porque tampoco llevaba tantos años en la profesión. Nunca llegué a agobiarme por no ganarla»
La carrera de casa
Sin tiempo para asimilar el éxito, estamos a las puertas de la siguiente gran cita de la temporada, el premio Gobierno Vasco, donde Guillermo presenta a Amedeo Modigliani. Lesionado en otoño, «le operamos en diciembre y el Carudel le llegó demasiado pronto. Ha reaparecido bien otras veces y estamos contentos con él». En caso de victoria, su equipo firmaría un triplete en las grandes citas donostiarras que no se consigue desde 1998, cuando Madrileña se lo llevó todo con Kashwan, Vicimar y Friday's. El domingo, otra cita con la historia.
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