Ane Urchegui: «Disfruto cada día del entrenamiento y que no cambie»

– ¿Cómo hace para compaginar el deporte con su profesión?

– Se puede decir que hago encaje de bolillos, acumulando horas de trabajo en momentos de menos competiciones para luego poder ausentarme. Normalmente la primera sesión de entrenamiento la hago en el gimnasio antes de trabajar, a las 7 de la mañana, y acabo la jornada acercándome a una cancha de prácticas que tengo relativamente cerca de casa en Barcelona. Al campo solo voy los fines de semana.

– ¿En qué club se entrena y con quién?

– En Vallromanes, con Joan Bronchales. Es el mismo entrenador de David Puig. Sí, uno de los españoles que está jugando en el LIV. La verdad es que estoy muy contenta. Cambiar de lugar de residencia y cambiar de entrenador no es fácil, pero estoy encantada. Es un entrenador técnico, de los que me gustan, de los que siempre están intentando mejorar el 'swing' y hemos encajado a las mil maravillas.

– Entiendo que es usted la que tiene que sufragar económicamente el gasto que supone tener entrenador.

– No dejo de ser una jugadora amateur que juego a golf porque me encanta este deporte y porque disfruto compitiendo. Estoy muy lejos de poder afrontar todos los gastos con ayuda de terceros. En mi caso soy yo la que hago todos los desembolsos para costearme el entrenador, el material y los viajes. Quedar campeona de Europa amateur es una satisfacción, una alegría, pero nada más. No llega un euro de más. A mí me toca trabajar de lunes a viernes, meter horas extras y pedir muchos favores a mis compañeras de trabajo para poder cambiar turnos.

– A pesar de todo, afronta un calendario deportivo interesante.

– Y que dure. Me gusta la competición, me gusta rendir, y soy de las que me enfado si juego mal. El día que eso no ocurra, habré perdido la ilusión, o será el día que deje de competir.

– ¿Qué va a jugar este año?

– El campeonato de España para mayores que he ganado un par de veces, el clasificatorio para el Europeo por equipos, me gustaría jugar también el campeonato de España absoluto en junio y también el clasificatorio para el Open Británico.

– Sin desdeñar la posibilidad de jugar otros torneos.

– En noviembre del pasado año por ejemplo logré una victoria de prestigio en el Internacional de Portugal Mid Amateur celebrado en el campo de Tróia Golf, al sur de Lisboa, y nunca descarto las opciones que se vayan dando durante el año.

– Por fin ganó el Europeo...

– (Ríe) Costó lo suyo. La primera vez en la que competí me puse nerviosa y cometí errores. En el segundo año tuve que jugar con unos palos antiguos y cuando iba primera me obligaron a retirarme. Fue a la tercera tentativa cuando lo logré. Me quité un peso de encima. Todavía hoy recuerdo lo emocionada que estaba.

– ¿Por qué no se planteó dar el salto a profesionales?

– El estilo de vida que supone ser jugadora profesional no me va. Por supuesto que me gustaría ser una de las diez mejores del mundo, poder jugar la Solheim y los mejores torneos, pero todo el camino que hay que recorrer no termina de convencerme. El golf es un deporte duro, hay que ser mentalmente muy fuerte, hay que trabajar horas y horas y aún haciendo todo eso lo normal es no cumplir objetivos. Muchos dejan de disfrutar del deporte al hacerse profesionales y yo nunca he querido eso. Yo sigo disfrutando entrenando porque me encanta y así quiero que siga siendo.

– ¿Cuál es la salud del golf en Gipuzkoa?

– Es buena. Siempre hemos tenido grandes jugadoras. En todos los clubes hay grandes promesas. En Basozabal mismo siempre han salido jugadores de la cantera. He vivido grandes momentos y siempre que puedo procuro acercarme para jugar con amigas como Ainhoa Olarra.