Ampo Ordizia no mereció perder ante la Santboiana
Los ordiziarras mandaron al principio, pero no supieron mantener su ventaja en una segunda parte sin acierto
Ampo Ordizia regresó de vacío de su visita al Baldiri Aleu al perder ante la Santboiana en un partido en el que los ordiziarras hicieron ... méritos más que suficientes como para regresar a casa con un resultado bien distinto en la reedición de la final de Liga de la temporada pasada. Los de Federico Gallo saltaron al terreno de juego concienciados de que podían conseguir la victoria ante un rival que venía de perder tres de los últimos cuatro partidos. Era una oportunidad de oro para sumar puntos, pero a los ordiziarras se les escapó el triunfo de las manos.
Comenzó bien Ampo Ordizia con una patada a palos de Cruz y un ensayo de Lee y posterior transformación del argentino (0-10). Una nueva patada de Cruz puso en el marcador el 0-13. Ampo Ordizia mandaba en el terreno de juego, pero un error defensivo propició que Álvaro García marcase el primer ensayo catalán (5-13). Y de nuevo Cruz, con otra patada, ponía tierra de por medio (5-16). El dominio en el juego y en el marcador era ordiziarra, pero al minuto siguiente Lescano, tras un autopase, recortaba distancias ante su exequipo (10-16). Una nueva patada a palos de Socino tras un golpe de castigo (13-16) dejó el partido abierto antes del descanso.
Tras la reanudación, de nuevo Cruz volvió a poner en ventaja a los ordiziarras con otra patada (13-19), pero su compatriota Socino se empeñó en robarle el protagonismo también con el pie (16-19). Ampo Ordizia vio cómo su preciada renta desaparecía en un abrir y cerrar de ojos tras el ensayo de Pigatto y la transformación de Socino (23-19).
A pesar del golpe, los ordiziarras no se vinieron abajo. Al contrario, Lander Gómez puso el oval tras la línea de marca en inferioridad numérica y Cruz se encargó de transformar (23-27). Quedaban apenas siete minutos para la conclusión, había que darlo todo en defensa, seguir jugando con cabeza, pero todo se truncó con el ensayo de Pigatto y la transformación de Socino (30-27). Una derrota dolorosa.
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