«Nos toca ser ambiciosos y sacar el partido como sea»
El entrenador del Gipuzkoa Basket, Mikel Odriozola, no teme el factor cancha en contra, prefiere «jugar con un campo lleno»
El Gipuzkoa Basket juega este viernes el partido definitivo de la serie ante el Tizona en Burgos (20.45 horas). Las dos victorias logradas por ... cada equipo han igualado al máximo la eliminatoria que otorga el pasaporte a la final four. El entrenador del equipo donostiarra, Mikel Odriozola, ha explicado este jueves en la víspera del quinto encuentro que están «dispuestos a sacarlo como sea, nos toca ser ambiciosos».
Después de cuatro enfrentamientos directos en dos semanas, las cartas están sobre la mesa. «Con la igualdad que hay en la serie y el ritmo al que juegan sabemos que será muy complicado, están muy bien entrenados y trabajan muy muy bien. Queremos ver si somos capaces de rascar el tercero allí y lograr algo que sería muy ilusionante para todos», destaca.
El Tizona ha demostrado sentirse cómodo jugando a un ritmo alto. Será clave que el GBC sea capaz de dominar el compás del partido. El donostiarra destaca también que los burgaleses «castigan mucho los errores y tenemos que minimizar eso porque es verdad que nosotros somos capaces de generar mucho acierto. Tendremos que controlar el rebote, porque el otro día, si lo hubiéramos conseguido, con el resto de esfuerzos que estábamos haciendo no se nos hubieran ido ocho arriba. Fuimos capaces de compensarlo, nos agarramos hasta el final y supimos encontrar nuestro espacio».
Para el desplazamiento el club ha llenado dos autobuses, y podían haber sido más. La no disponibilidad de más entradas impide que vayan más aficionados. Más de 200 personas acompañarán mañana a los de Odriozola en su viaje, eso «para nosotros y para el club también es muy importante. Uno de los objetivos del club era generar un poco más de ilusión en la gente y lo hemos conseguido. Toca ser ambiciosos y vamos a intentar sacar el tercero allí. La final four sería muy ilusionante para todos».
El factor cancha en contra no preocupa demasiado. «Va a ser un ambiente chulo de baloncesto en el que sabemos que nos van a apretar. No me sale decir que porque ellos juegan en casa tienen más presión. Jugar como local tiene su lado positivo y su lado negativo. Nos tendremos que agarrar a los lados negativos que tendrán ellos por jugar en casa. A mi me gusta jugar en un campo que esté lleno. Que nos aprieten está bien, tener que jugar con esa tensión, y para mi son partidos chulos de vivir, que la final te obligan a enfocarte mucho más. Es una competición real y un reto. A nivel de comunicación o concentración o de estar tranquilo es mas dificl pero tambien es mas bonito».
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