El Baskonia, una máquina física obligada a volver a ser engrasada
El Acunsa GBC será mañana su segundo rival en la semana de tres partidos que afrontan los vitorianos después de tres semanas de inactividad
El Baskonia, aún más con Dusko Ivanovic sentado en el banquillo del Fernando Buesa Arena, siempre se ha caracterizado por ser un equipo ... que se basa en el esfuerzo físico para después desplegar un juego veloz y con acierto que puede llegar a pasar por encima del rival, en el caso de mañana, el Acunsa GBC (a las 20.30 horas). Sin embargo, es una incógnita en qué forma va a llegar el conjunto vitoriano a la trascendental cita del partido correspondiente a la trigesimaquinta jornada de la ACB, aplazado debido al brote de Covid-19 que ha sufrido el vestuario del Baskonia.
23 días de inactividad competitiva, con un confinamiento domiciliario de por medio, pueden dar para mucho, y más si en el regreso hay dos partidos programados en 48 horas. Los alaveses recibieron ayer al Joventut en el primero de los tres encuentros que tienen pendiente por jugar esta semana y perdieron 71-79 con las bajas de Youssopha Fall y Alec Peters.
Además, por si el virus no fuera suficiente, los New York Knicks han pescado en Vitoria durante este parón y se han llevado –no sin antes pasar por caja– al argentino Luca Vildoza, movimiento que ha obligado a que Josean Querejeta se haya movido en el mercado por primera vez esta temporada para incorporar a Quino Colom y Frantz Massenat. Ante esta situación, Ivanovic ha incorporado en los entrenamientos a los dos canteranos que han jugado esta temporada en el Juaristi Iraurgi de LEB Plata. Pavel Savkov y Ondrej Hanzlik fueron dados de alta para el partido de ayer, aunque no debutaron.
No hay que olvidar que el Baskonia es el vigente campeón de la Liga Endesa después de que fuera el mejor equipo en preparar y aprovechar la extraordinaria fase final que se disputó en Valencia. El entrenador montenegrino puso a su equipo a punto para el tiempo de competición necesario y conquistó contra pronóstico el título liguero. Sin embargo, en una temporada con el sistema de competición habitual, el Baskonia suele tener sus picos y valles en la forma física. Hizo el sprint final para tratar de entrar en el playoff de la Euroliga, pero lo pagó en los siguientes partidos con derrotas ante Murcia y Burgos y una victoria ajustada contra el Estudiantes.
El líder de la actual plantilla es Pierria Henry, encargado de imprimir ritmo, velocidad y –a veces– criterio al juego baskonista. Fue MVP de la Eurocup en la temporada 2018/19 y está nominado al quinteto defensivo del actual curso de la ACB. En su juventud jugó al fútbol americano y esa práctica le ha permitido alcanzar una rapidísima velocidad de manos para robar y desviar balones. Su gran temporada no ha pasado desapercibida y la Gazzeta de Grecia ya le ubica en el Real Madrid para el próximo curso.
Un derbi sin mucho afecto
Acunsa GBC necesita ganar los tres partidos que le quedan y esperar resultados del Bilbao Basket y Estudiantes para salvarse. Se ha dado la casualidad de que el descenso matemático pueda llegar en el derbi vasco contra el Baskonia, el club que más se opuso el pasado verano a la ampliación del número de equipos en la ACB y al ascenso del Gipuzkoa Basket. Cabe recordar que Baskonia y Alavés comparten propietario (Josean Querejeta), pero no línea estratégica, porque mientras el equipo de fútbol se ha opuesto firmemente ante la Superliga, el de baloncesto es de los más interesados en que la competición doméstica pierda peso en el calendario en favor de la continental.
La relación entre los dos clubes, de todos modos, se ha enfriado mucho los últimos años.
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