Brizuela: «Mi hijo está en la UCI, se ha recuperado, pero he pasado los peores días de mi vida»

Nada más sonar la bocina Brizuela se quedó sentado llorando en el banquillo, consolado por sus compañeros. Preguntado por esto en la entrevista post partido en Movistar+, el donostiarra desveló que «la semana pasada tuve los peores días de mi vida. Mi hijo está en la UCI (Bruno, nacido el pasado 20 de enero), está bien, ya se ha recuperado, pero han sido los peores días de mi vida, de mi mujer y de mi familia».

Añadió que «dudé en si venir o no a la Copa, y mis compañeros me han apoyado, han estado conmigo, al igual que mi familia. Ha salido así y todo lo malo que tenía dentro ha terminado saliendo», concluía el donostiarra. Es por esta razón también por la que el guipuzcoano ha pedido a Sergio Scariolo no ser incluido en la convocatoria de la próxima semana para concluir con la selección los partidos clasificatorios para el Mundial.

Campeón de Europa en septiembre, Darío Brizuela, de 28 años, dejó en los cuartos de final de la Copa que se está jugando en Badalona otro episodio para el recuerdo de su carrera. Destacado por su gente más cercana como una persona muy cercana, humilde y tranquila, cuando salta a la pista acapara todos los focos y se convierte en un auténtico animal competitivo. En sus mejores noches levita sobre el parquet y sin contar con un físico que le permita abrirse camino entre jugadores más fuertes y más grandes, los conceptos con los que cuenta le permiten hacer entradas y pararse para lanzar a canasta como un bailarín.

Los 27 puntos en 24 minutos contra el Barcelona fueron acompañados con un altísimo grado de acierto. Seis de nueve en tiros de dos, tres de seis en triples y seis de seis en tiros libres para poner patas arriba el Palau Olimpic de Badalona y eliminar al conjunto culé, que no supo ni cómo parar a Brizuela ni cómo neutralizar el bello juego sin balón de los jugadores dirigidos por un Ibon Navarro que sacó la pizarra a pasear ante Saras Jasikevicius.

Bombas, tiro tras bote, triples lejanos, bandejas y entradas con contacto casi imposibles de encestar, Brizuela firmó una actuación estelar en una competición como la Copa que exige que los grandes jugadores aparezcan en los grandes momentos. En la edición de 2021, la disputada en Madrid sin público, la 'Mamba Vasca' consiguió 33 puntos también contra el Barça, pero aquel partido terminó con la eliminación de los malagueños.

Si el jueves logró la revancha contra los culés, este sábado podrá hacer lo mismo. En la Copa de 2020 Brizuela fue el autor de 22 puntos en la final que el Unicaja jugó contra el Real Madrid. Los blancos arrasaron (68-95), pero el donostiarra formado en el Easo y en el Estudiantes está en disposición de escribir una nueva página en su ascendente trayectoria en la semifinal de mañana sábado a las 18.30 horas contra el conjunto dirigido por Chus Mateo, que sufrió para deshacerse del Valencia Basket (86-85).

Por Bruno, por su familia, por el Unicaja de Málaga y por el baloncesto, Darío Brizuela seguirá emocionando con su juego en esta Copa ACB, y el aficionado agradece su presencia en Badalona a pesar de lo vivido los últimos días.