A por un buen sorbo de Borgoña
Baloncesto. ·
El IDK afronta hoy (20.30 horas), con solo ocho jugadoras, la ida de las eliminatorias de la Eurocup ante el potente Charnay francés
No tendrá mucho tiempo la expedición del IDK Euskotren de degustar una de los principales reclamos de la zona de Borgoña, donde esta noche (20.00 horas, ETB 4) juega el encuentro de ida de los dieciseisavos de final de la Eurocup contra el Charnay Bourgogne Sud francés. Quizá esa copa de vino deba esperar al choque de la semana que viene en el Gasca, aunque si el resultado del envite de hoy es satisfactorio, por qué no dar un sorbito. Sin pasarse, porque la eliminatoria se dirime a ochenta minutos. Lo de esta noche será el primer paso.
El IDK ya ha hecho historia al ser la primera vez que se clasifica para las eliminatorias en competición europea y a partir de aquí no hay que mirar atrás sino intentar solventar todos los obstáculos que se pongan por delante. El conjunto francés, las 'pinkies' (rosas), como se les conoce por su indumentaria son el primer escollo. Complicado, sí. Pero no imbatible. Si el conjunto guipuzcoano logra solventar esta eliminatoria se mediría con el ganador del cruce entre las italianas del Dinamo de Sassari con las murcianas del Jairis.
La expedición del IDK Euskotren partió ayer desde Biarritz, donde cogió un avión con destino a Lyon. Desde allí, en autobús hasta la localidad de Charnay-les-Macon, donde se disputa el partido. Alegría y responsabilidad en los rostros de las jugadoras del equipo donostiarra.
Ocho serán las que salten hoy a la pista después de las bajas anunciadas por Azu Muguruza de Delicia Washington e Iris Mbulito. Algo con lo que ha tenido que luchar el equipo de Ibaeta las dos últimas jornadas ligueras y que le ha penalizado en la derrotas ante el Baxi Ferrol en el Gasca y contra Girona en Fontajau.
No es una cuestión de acordarse de quién no está, sino de sacar el máximo rendimiento a las jugadoras que están. La batería interior del IDK está al completo (Massey, Becker, Halvarsson y Pendande), con lo que es donde más fiable va a ser el cuadro de Azu Muguruza. Posiblemente Massey eche una mano en la posición de alero y las rotaciones estarán medidas, jugando también con Alba Prieto y Lara González juntas en algún momento de partido. Roso Buch y Nastja Claessens tendrán una importancia brutal en el choque, ya que serán –junto a Alba– las mayores amenazas de tiro del equipo guipuzcoano.
Charnay, rotación corta
Además, se da la casualidad de que la mejor jugadora del Charnay actúa en posiciones exteriores. Se trata de la camerunesa Monique Akoa-Makani, quien promedia en la Eurocup 11 puntos, dos rebotes y cinco asistencias. El ataque es importante pero que la defensa del IDK sea férrea y no permita tiros fáciles sin cargarse de faltas puede ser clave.
La buena noticia es que el Charnay es un equipo también con una rotación de ocho o nueve jugadoras. Su valor más fiable no puede actuar en la Eurocup por un tema de cupos, se trata de la estadounidense Shakalya Thomas, quien solo disputa la liga y Copa francesas. Con todo, es un conjunto que hasta hace poco marchaba en primera posición de la competición.
Además de Akoa-Makani, destacan los números de la australiana Maddie Garrick, que es una de las amenazas exteriores del Charnay, al igual que Elisabeth Balogun con un espectacular 12 de 22 en la Eurocup desde más allá del arco. A estas jugadoras, hay que sumar a Maeva Djaldi-Tabdi y Paula Strautmane.
El Charnay solo ha caido tres veces en su pista este curso. Es una cancha muy pequeña, ruidosa y con el público cerca. El factor ambiental será clave y el IDK, como dijo su entrenadora, deberá mantener «la cabeza fría». Posiblemente la eliminatoria no se decida la ida y la intención del IDK será traerse un buen resultado para el miércoles. Hasta ahí puede esperar, guardado en la temperatura idónea, un buen Borgoña.
