La confirmación de Kilian Jornet y la sorpresa de Ali Anne Dvergsdal

En la carrera femenina dio la campanada la noruega Ali Anne Dvergsdal, que en su primera participación en Zegama se llevó el triunfo de calle con un tiempo de 4h36:06, sacando más de once minutos a la segunda clasificada, la italiana Elisa Desco, que llegó en 4h47:30. Completó el podio la francesa Amandine Ferrato, con 4h47:38, a tan solo ocho segundos de su predecesora. La noruega no entraba dentro de los pronósticos como ganadora.

A los sones de la canción de Vangelis 'Titans', más de medio millar de corredoras y corredores, entre los que se encontraban la auténtica élite mundial de corredores de montaña, iniciaron esa gran carrera de montaña que es la Zegama-Aizkorri. Antes de la salida, se realizó un homenaje a la fallecida Amaya Acha, se bailó el aurresku de honor y José Luis Arrieta, homenajeado el sábado junto a Enrique Erentxun, dio el pistoletazo inicial.

Eran las nueve de la mañana pero el día anunciaba que el sol iba a apretar, y así terminó siendo. El calor, sin duda, fue un obstáculo suficiente para que no se pudiera batir el récord de la prueba, que sigue ostentando el noruego Stian Angermund-Vik con un tiempo de 3h45:08, que logró en 2017. El corredor escandinavo quedó en cuarta posición.

Ese calor exagerado se dejó notar en los tiempos de los corredores. Únicamente los tres primeros alcanzaron la meta en menos de cuatro horas. Angermund-Vik ya se fue a las cuatro horas y doce minutos, muy lejos del podio.

El americano Andy Waker pasó primero por el control de Ultzama (km. 8,5), seguido de un Kilian Jornet que comenzó tanteando a sus rivales, para tomar la cabeza de la carrera enseguida, nada más pasar el segundo control en Atabarreta (km. 13,5).

El catalán no abandonaría ese puesto hasta entrar en meta, sacando más de dos minutos y medio al segundo. Sin embargo los siguientes puestos fueron cambiando de situación a lo largo de la carrera, que dominaba claramente Kilian pero que no se terminó de definir -al menos en lo relativo al podio- hasta después del paso de Aizkorri.

En ese momento, se colocó segundo el polaco Bartlomiej, tras adelantar al francés Thibaut que iba delante, después de Sancti Spiritu colocándose este tercero. Ya no se alterarían más estos puestos hasta el final de carrera.

El primer vasco en pasar por el arco de meta fue Ander Iñarra, de Lezo, terminando el de la Euskal Selekzioa décimo con un tiempo de 4h12:01. Por otra parte Aritz Egea terminó en el puesto 46 tras una carrera en la que sufrió mucho y que con un gran esfuerzo la concluyó agradeciendo al público el empuje que da a los corredores.

En mujeres, la hegemonía se la llevó la noruega Eli Anne Dvergsdal, que ya ocupaba la primera plaza desde el primer control de Ultzama y estuvo intratable hasta el final, sacando a su inmediata perseguidora nada menos que once minutos y medio.

La guipuzcoana Oihana Kortazar quedó en un estupendo quinto puesto. Terminó el maratón en 4h52:16 por detrás de la catalana Gisela Carrión, que lo hizo en 4h49:51.

Además del calor, el público fue otro gran protagonista este domingo en Zegama. Una multitud de agolpó en los puntos álgidos por donde pasaba la carrera. Cencerros, bocinas, gritos de ánimo, aplausos ensordecedores... Fue la tónica general en el recorrido. Más de uno se quedó afónico en Sancti Spiritu, uno de los puntos donde más gente se congrega para ver cómo suben los corredores por el estrecho pasillo que forman los aficionados en esa empinada cuesta que lleva camino a la cima de Aizkorri. En la cumbre también se congrega muchísmo el público.

La prueba fue un éxito y apenas se registraron algunas incidencias. Resaltar la evacuación en helicóptero de un corredor en la zona de la cueva de San Adrián. También, varios corredores sufrieron golpes de calor y tuvieron que abandonar la prueba.

El calor fue el gran convidado en la Zegama-Aizkorri, haciendo estragos en muchos corredores y corredoras. La mendaroarra Maite Maiora, que llegó en el puesto número 11, no fue ajena a este problema: «El calor ha apretado mucho y eso se ha notado a la hora de correr».

Hora y media después de dar la salida a los séniors, comenzaron su carrera los más jóvenes, ese casi centenar de chavales entre 16 y 18 años que participaron en la octava edición de la Zegama-Aizkorri Junior Trail, con 10,4 kilómetros de recorrido y 1.016 metros de desnivel acumulado.

Ganaron Gontzal Murgoitio, de Elorrio, con 45:52 y Laia Gonfaus, de Gironella, con 57:50. El catalán Albert Pérez (47:48) y el navarro Iker Diges (48:05) completaron el podio masculino. La andorrana Andrea Sinfreu quedó segunda con 59:03 y Alba Mendiolagoitia, de Gijón, con 59:59.