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Organizadores y patrocinadores posan con el cartel de la tercera temporada de Opus Lírica, este lunes en el exterior del Kursaal. Lobo Altuna
Voz de alarma por la ópera en San Sebastián

Voz de alarma por la ópera en San Sebastián

La compañía Opus Lirica programa un único título para la temporada que viene, a la espera de un mayor apoyo de las instituciones. Este viernes organizan un concierto solidario para recaudar fondos

Itziar Altuna

San Sebastián

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Lunes, 15 de octubre 2018, 14:18

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En su empeño por dotar a la ciudad de una temporada estable de ópera, la compañía Opus Lirica presentó este lunes su tercera temporada, que en esta ocasión incluirá un único título. Será 'La flauta mágica' de Mozart, que se representará los días 22, 23 y 24 de febrero en el Kursaal -la última función se adaptará al público familiar-. La directora e impulsora de la compañía, Ainhoa Garmendia, reconoció que «de momento» no pueden confirmar un segundo título, tal y como ha sucedido en los últimos años, aunque se mostró «optimista» en poder conseguirlo, siempre y cuando reciban apoyo económico por parte de las instituciones o de las empresas privadas. «Estamos viviendo un momento muy complicado», admitió.

Para dar a conocer el proyecto al público en general y recaudar fondos, el viernes organizarán un concierto en el Kursaal, en colaboración con el Orfeón Donostiarra y la Orquesta de Opus Lirica, en el que se interpretarán los mejores coros de la historia de la ópera bajo la dirección de José Antonio Sainz Alfaro.

Con un «inmenso dolor», en palabras de Garmendia, la compañía ha declinado programar el año que viene ningún título en el teatro Victoria Eugenia, «un lugar maravilloso para hacer ópera», porque la ayuda del Ayuntamiento «no es suficiente». «Aunque nos cedan el espacio de forma gratuita, hay que pagar muchos gastos», insistió y reconoció que la última representación de 'Orfeo y Eurídice' se hizo con un presupuesto más limitado, lo que influyó de forma negativa en la calidad final de la obra. «Nuestro proyecto es hacer cultura en Donostia, en este caso ópera, pero siempre manteniendo un nivel de calidad, y estamos luchando por ello».

La directora de Opus Lirica recordó que, al margen de las ayudas económicas -la Diputación es la única institución que realiza una aportación económica de 25.000 euros al año-, hay otras maneras de colaborar, como «facilitar la comunicación y difusión de los espectáculos o compartiendo los gastos de producción de los montajes», dijo. «Apostamos por los valores guipuzcoanos y no solo en cuanto a los intérpretes. Creamos las producciones desde cero aquí, lo que conlleva que la escenografía se produzca aquí y contemos con técnicos de teatro y vestuario locales. En este sentido, también estamos apostando por el talento de Gipuzkoa y Donostia».

Ainhoa Garmendia también se mostró muy crítica ante la falta de apoyo económico por parte del Gobierno Vasco, que considera la oferta de la ABAO como «la ópera de todo Euskadi». En este sentido, aseguró que «nuestra propuesta es compatible con la de la ABAO. Nosotros no competimos con ellos, aspiramos a atraer a un nuevo público, que en un futuro sí podrá ir a Bilbao a ver a las grandes estrellas de la ópera que nosotros no podemos contratar». Antes de rendirse y abandonar el proyecto, la directora de Opus Lirica anunció que volverá a reunirse con todas las instituciones «para que entiendan la base del proyecto, que es ofrecer ópera de calidad». A pesar de las dificultades que atraviesa la compañía, «creo que todavía hay una esperanza», concluyó.

Coros de óperas

De momento, con el objetivo de llamar la atención sobre la situación de la compañía y recaudar fondos, el viernes (20.00 horas) el auditorio del Kursaal acogerá un concierto del Orfeón Donostiarra y la Orquesta de Opus Lirica, que interpretarán una «selección de los mejores coros de ópera», según indicó el director de la agrupación coral, José Antonio Sainz Alfaro. La actuación incluirá fragmentos de algunas de las óperas más representantes de Verdi, como 'Macbeth', 'La traviata' o 'Nabucco', o el preludio de la zarzuela 'El Caserío' de Guridi.

La presencia del Orfeón Donostiarra en este concierto debe entenderse como un «apoyo» de la entidad al proyecto de Opus Lirica. «Queremos llenar el Kursaal y demostrar que esta ciudad quiere tener ópera en su programación», señaló el presidente del Orfeón, José María Echarri. Junto a él, Sainz Alfaro destacó que «es muy loable» que haya una entidad privada que esté trabajando en buscar nuevos públicos para la ópera, algo que desde las instituciones no se hace, dijo. «Por eso acogemos con mucho cariño este concierto».

El diputado de Cultura, Denis Itsaso, mostró su apoyo al concierto solidario del viernes y a la iniciativa emprendida por Opus Lirica hace cinco años, pero quiso compartir esa «voz de alarma» lanzada por su directora. «Creo que es necesario compartir este tipo de proyectos que generan cultura e intentan renovar públicos, y que de forma prioritaria trabajan con el talento guipuzcoano. Ahora debe ser el público, con su asistencia, quien demuestre si verdaderamente quiere tener uno o dos títulos de ópera al año en el Kursaal».

Por su parte, el vicepresidente de la Asociación Donostiarra de Amigos de la Ópera (ADAO), Jagoba Fradrique remarcó el «esfuerzo titánico» que lleva a cabo Opus Lirica por acercar la ópera a San Sebastián. «El público ha demostrado que quiere tener ópera en la ciudad, y muestra de ello es el movimiento asociativo que hemos creado, que ya cuenta con más de 200 amigos», explicó.

Producción futurista

Junto al concierto solidario, el acto de ayer también sirvió para presentar la tercera temporada de Opus Lirica, que de momento incluye una único obra. 'La flauta mágica' será el décimo título que ponga en escena la compañía los días 22, 23 y 24 de febrero, con Pablo Ramos en la dirección de escena y de nuevo con la producción de la Ópera de Cámara de Navarra (OCN). «Será una producción un poco futurista, muy visual, en el que se utilizarán mucho las luces y los efectos, pero siempre siendo muy fieles a la historia», adelantó Ainhoa Garmendia.

Una de las novedades de la próxima temporada será la inclusión de una tercera función, dirigida a un público familiar. «Será una versión reducida, que tiene como objetivo acercar la ópera a los niños, en esa labor por atraer nuevo públicos».

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