La música ilumina al fin las noches de Miramar

Público y organización llegaban a Miramar entre la frustración de las suspensiones previas, la esperanza de experimentar al fin íntegramente la propuesta del festival, y con furtivas miradas al cielo: pese a los pronósticos favorables, ya nadie se fiaba. Los puestos de comidas y bebidas de Magna y Bokado, con una oferta que iba de la hamburguesa a los pintxos, aguardaban a los espectadores. Iván Ferreiro, que disfrutaba de los primeros compases de la noche como un festivalero más, no se asustaba. «Soy gallego», bromeaba.

La tarde-noche arrancó con la original propuesta de Lura, María de Lurdes Pina Assunçao, la portuguesa/caboverdiana que aúna culturas y ritmos y sorprendió a los más madrugadores con su energía. Fue una estupenda entrada en calor, en el llamado escenario La Concha, antes de que Travis Birds siguiera elevando el listón en la primera actuación de la noche en el denominado Escenario Palacio, en la trasera del edificio. La cantautora madrileña, con su voz tan personal, alternó algunos de sus temas más conocidos con las canciones de 'Perro deseo', su último disco, en el que también han colaborado artistas como Depedro y Leiva. El público aplaudió la primera actuación completa que recibe ese escenario, que solo acogió el primer día apenas quince minutos de María José Llego antes de que comenzara el diluvio. Travis redondeó un show muy aplaudido por el público.

Casi a la hora en que la luz de la tarde empezaba a apagarse comenzó la celebración del solsticio preparada por Juan Mari Beltran, el polifacético músico, compositor, instrumentista, investigador y profesor de música guipuzcoano. Txalapartari, dulzainero y txistulari, fue el encargado de dar la bienvenida al verano acompañado de músicos como Ander Barrenetxea, Aitor Gabilondo, Errege Belda, Ixiar Jauregi y Andoni Salamero, además de los dantzaris de Kresala Dantza Taldea. Irrumpieron en los jardines en comitiva festiva y luego combinaron música y danza en un anochecer sugerente.

Y así, tras la mezcla de tradición y modernidad del solsticio, llegó la hora del cabeza de cartel del día, Iván Ferreiro, el icono gallego del indie/pop/rock. El músico había colgado el 'no hay billetes' en su concierto de Intxaurrondo el pasado diciembre y anoche volvió a ofrecer una vibrante descarga en la que no faltaron las canciones de su último disco, 'Trinchera Pop', como 'En el alambre', y algunos de sus éxitos, como 'Turnedo', aunque desde su escenario de Miramar no se viera la playa, como dice en su célebre canción. Ferreiro nunca defrauda. (Nota para el cuore: era uno de sus primeros conciertos tras su reciente boda).

En el fin de fiesta no faltó de nada. Álex del Toro, el DJ donostiarra que hace tantas cosas en tantos sitios, fue el encargado de poner la música de cierra, a medianoche. Alex se mostraba «feliz de participar en un festival tan original y en lugar tan singular de mi ciudad». Y puso la banda sonora al final de la noche para los más animados.

Hoy llegarán los balances más reposados. La mala noticia ha sido el tiempo que canceló dos de los tres días programados; la buena, que este festival que se suma al verano cultural guipuzcoano tendrá continuidad tras el duro pero estimulante aprendizaje de este año. Y en la agenda de Iñigo Argomaniz, responsable de Get In (cuyo equipo se ha empleado a fondo en los preparativos y organización, aunque la lluvia haya jugado en contra), quedan dos notas marcadas en rojo: Andrés Calamaro está empeñado en actuar en Donostia, «aunque sea otra vez en el Kursaal», y La Oreja de Van Gogh también se quedó frustrada el jueves tras la cancelación por la tormenta de su regreso a casa. Ya se piensa en cómo y cuándo será ese concierto donostiarra del quinteto. Quizás haya que esperar al próximo año, pero será a lo grande.