Daniel Barenboim apela a la unidad en el Año Nuevo de Viena

Los años empiezan cuando suena la Marcha Radetzky en el icónico Concierto de Año Nuevo en Viena. Y así fue una vez más este 2022, de nuevo con público tras el vacío del año pasado en la Sala Dorada del Musikverein, la sede de la Sociedad de Amigos de la Música de Viena. Con la Orquesta Filarmónica de Viena bajo la batuta, por tercera vez, del maestro argentino-español-israelí Daniel Barenboim, dando una lección de maestría y conocimiento musical además de un breve 'speech' esperanzado en donde elogió el poder sanador de la música como vector de superación de la tragedia que ha supuesto la pandemia.

Desde 1941, ni la Segunda Guerra Mundial ni la pandemia de Covid han hecho que se suspenda el Concierto de Año Nuevo que ofrece la Filarmónica de Viena el día 1 de enero por la mañana. El año pasado se hizo a puerta cerrada y esta vez el público volvió o aunque con aforo reducido. En la elaboración del programa Barenboim persiguió el equilibrio perfecto entre lo viejo y lo nuevo, con quince piezas, de las que seis no habían sido nunca interpretadas. Además de las obras de Johann, Josef y Eduard Strauss, apareciron los compositores Carl Michael Ziehrer y Joseph Hellmesberger, una apuesta personal de este director, que cumplirá 80 años en 2022 y que lleva más de cinco décadas trabajando estrechamente con la Filarmónica de Viena. No faltó el esperado cierre con el 'Danubio Azul' y la 'Marcha Radetzky', que no por consabidas dejan de ser las obras más deseadas por el público, este año compuesto por mil espectadores vacunados y con mascarilla FFP2, que además mostraron una PCR negativa realizada como máximo 48 horas antes del concierto siendo, a su vez, representantes de los millones que siguieron la retransmisión televisiva en directo para noventa países.

En España la voz de la retransmisión volvió a ser el donostiarra Martín Llade, habitual de Radio Clásica.Barenboim ha dirigido este concierto tres veces, después de los de 2009 y 2014. Ayer se anunció también que el próximo año el director será Franz Welser-Möst, que se pondrá al frente del concierto por tercera vez.