De la new wave de Joe Jackson a la vanguardia de John Zorn

Será un par de días antes, este jueves y en horario de tarde, cuando Joe Jackson (Burton Upon Tren, Reino Unido) aterrice sobre las tablas del Kursaal para abrir el telón como primer invitado al baile. Una de las cabezas visibles del triunvirato de la new wave llega a Donostia con un álbum recién horneado, 'Fool' (2019, earMusic), donde dará por finalizado el breve tour europeo que le ha tenido ocupado recorriendo escenarios en la Selva Negra, la Toscana y Barcelona durante la segunda quincena de julio.

Desde el antaño popular 'Is She Really Going Out With Him' del LP Look Sharp! (1979, A&M), Jackson ha entretejido en este tiempo y de forma magistral la miscelánea de géneros entre el jazz, el punk, la world music, el pop, lo contemporáneo e, incluso, la salsa. Pasados ya los 60 años de edad, este camaleónico gurú de la mezcla de estilos no desea tanto volver atrás en el tiempo como viajar por un instante al pasado para celebrar sus 40 años de carrera musical. Quizá por ello haya querido recuperar a la banda que le ha acompañado en sus más admirados trabajos y de la que tanto orgullo siente. Un mirar hacia atrás sin intención de retroceder.

El jazz nórdico también tiene su espacio el viernes a las 18.00 horas en el Kursaal, aunque no tanto. Es decir, nórdico sí, pues Atomic y la Trondheim Jazz Orchestra han decidido unir fuerzas para imaginar uno de los espectáculos más inigualables de jazz escandinavo. Pero quizá no tanto, pues ambas formaciones cuentan con un bagaje a las espaldas que hace tiempo que les desmarcó de esa frialdad en la ejecución de los músicos del Báltico.

Hace casi una década que Atomic no se presentaban en San Sebastián, tras su paso por las Terrazas de la Zurriola, años que han empleado en no dejar de girar por el mundo, en publicar trece discos y en demostrar que el norte de Europa se encuentra bien en forma. Alejados de los academicismos, traen la frescura del free jazz norteamericano con el minimalismo europeo, el swing abierto junto con un fino groove o como ellos mismos lo definen: «Una danza de natación sincronizada entre tiburones».

La TJO sube su apuesta con una formación de ocho intérpretes única y cuidadosamente seleccionada para esta colaboración. A pesar de nacer en los 90 como un proyecto del conservatorio del Mid Norwegian Jazz Center y el Jazz Line at Trøndelag Conservatory of Music (NTNU), el conjunto queda muy lejos de ser un grupo de escolares. Entre otros, Chick Corea, Joshua Redman o Pat Metheny son algunas de las estrellas que han acompañado a la orquesta por los escenarios de todo el planeta. Nada más que añadir, señoría.

El fin de semana tendrá el apellido de Zorn. El Masada Marathon de 2013 ya ha pasado a la historia del Jazzaldia como uno de los momentos cumbre que le han otorgado un lugar exclusivo en el Olimpo del festival. El propio director del festival, Miguel Martín, ha recalcado el «orgullo que supone contar de nuevo con una leyenda del jazz de vanguardia y de la composición contemporánea» como es él.

En esta ocasión, Zorn ha decidido recuperar el repertorio de 'Bagatelles', un libro de más de 300 canciones escritas por él mismo en 2015, de las que más de 50 serán interpretadas en las tripas del anfiteatro donostiarra. Para ello y en números: 14 bandas, más de 30 músicos y dos días de concierto (27 y 28 de julio).

Un amplio espectro de intérpretes entre los que destacan algunas de las referencias más brillantes del ambiente neoyorkino como son Marc Ribot, John Medeski, Craig Taborn, Mark Feldman, Sylvie Courvoisier y su última incorporación, la pianista canadiense Kris Davis. Virtuosismo, imaginación y disciplina para representar el fascinante universo de rock, jazz y música clásica que emana del artista. ¡Y que dé comienzo el espectáculo!