El 'Rifkin' de Woody Allen se estrena al fin en EE UU
Cine. La película que el director rodó «en la preciosa Donostia», como la definen los críticos, llega mañana a las salas de su país, un año después que en Europa
No son buenos tiempos para Woody Allen en su país, envuelto en la polémica por acusaciones de supuestos abusos sexuales, pero su cine al menos ... llega a las pantallas. Aunque sea con retraso, mañana se estrena en salas y en plataformas de Estados Unidos 'Rifkin's Festival', el filme que rodó en San Sebastián y Gipuzkoa con el Zinemaldia como escenario. El estreno americano llega más de un año después que en Europa, con una tibia acogida crítica y algunos guiños a la capital donostiarra de los periodistas norteamericanos. «Es una pena que en sus paseos por esa preciosa ciudad no entren en ninguno de sus excelentes bares de pintxos», escribe The Hollywood Reporter.
Desde que volvieron a estallar las acusaciones sexuales contra Allen, nunca refrendadas por los jueces, se complicó el trabajo del autor de 'Annie Hall'. Su anterior película, 'Día de lluvia en Nueva York', se estrenó en Estados Unidos casi clandestinamente, y para rodar su siguiente historia, 'Rifkin's Festival', película número 50 de su filmografía, se 'exilió' en Europa financiado por los catalanes de Mediapro.
La película se rodó en San Sebastián y otras poblaciones de Gipuzkoa en verano de 2019, protagonizada por Wallace Shawn (su elección es para muchos uno de los errores del filme), Gina Gershon, Elena Anaya y Louis Garrel. Ambientada en el Festival de Donostia, cuenta el viaje de un escritor y profesor de cine, encarnado por Shawn, y su mujer, publicista, al ambiente del Zinemaldia. En San Sebastián fue el estreno mundial en septiembre de 2020, como apertura del certamen.
The Hollywood Reporter describe la película como una historia melancólica y nostálgica del viejo cine, con los homenajes que se tributa a Bergman o Fellini, «como si Allen admitiera que nunca podrá ser tan brillante como sus ídolos». The Filme Stage también incide en los malos momentos de Allen en su país. «Acostumbrado a los grandes estrenos, ahora llega a Estados Unidos tiempo después de pasar por Europa y no por los circuitos principales», dice.
El rodaje en San Sebastián movilizó a cientos de personas en ese verano de 2019 y generó una enorme expectación, aunque a la hora de ver el resultado el filme no cumplió las expectativas. Es eso que los fieles de Allen califican «una obra menor». El público norteamericano tiene ahora la palabra. Además llega también a salas de otros países latinoamericanos como México. La actriz Gina Gershon anunciaba ayer el estreno en su Instagram, con una foto en la cama del María Cristina, donde recordaba los nervios y días felices del rodaje.
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