Aritz Moreno: «Me esperaba que la película se disfrutara pero para nada que fuera favorita»

Aritz Moreno vuelve a Sitges por la puerta grande con este largometraje, basado en la novela homónima de Antonio Orejudo, después de darse a conocer en este mismo festival con dos cortos, 'Cotton Candy' (2008), que inauguró el festival y 'Cólera' (2013), en el que también participó Luis Tosar y fue seleccionado en más de 300 festivales de todo el mundo. «Ha sido muy bonito volver aquí. Además me lo dijo el propio director del festival, Ángel Sala, que les hacía mucha ilusión ver esa evolución tan orgánica y esa fidelidad de gente que ha participado con cortos y que ahora presente su primer largo; es algo muy natural y bonito».

'Ventajas de viajar en tren' es una obra arriesgada y sumamente original que llevaba gestando el realizador donostiarra desde hacía cinco años. Adaptar al cine un libro tan complicado a nivel de estructura, con mezcla de géneros, narradores y de múltiples historias que se asemejan a las muñecas rusas ha sido una tarea ciertamente complicada. «Es una comedia negra, extrema en algunos momentos, con otros de thriller, de terror, romanticismo...y sobre todo surrealismo», la define Moreno. Admite que su película es «muy exigente, porque ofrece algo muy novedoso, extraño y atractivo al mismo tiempo, pero es para todo el público». Eso sí, recomienda acudir con la «mente abierta». Sabe que no le va a gustar a todo el mundo, «obviamente, pero al tratarse de un trabajo tan diferente, habrá a gente que eso le atraiga y a otros que les distancie más».

El día de la premiere oficial gustó y mucho, a juzgar por las carcajadas que se escucharon durante la proyección y los aplausos que se alargaron hasta el final de los créditos. «El recibimiento fue impresionante, además tenía mucha curiosidad. Yo he visto la película cientos de veces pero lo he hecho solo o con parte del equipo técnico y no tenía ningún 'feedback' del público. Hasta que no compartes una cosa no sabes si va a funcionar o qué va a pasar y la verdad es que fue una locura absoluta. Las entradas se agotaron días antes de la proyección y ver el aforo completo de 1.200 personas... Sabía que Sitges era el sitio ideal para la película, por el público que tiene, y la verdad es que rieron y aplaudieron mucho», cuenta satisfecho mientras asimila semejante acogida. «No nos lo esperábamos. Sí el hecho de que pudiera ser una peli que aquí se disfrutase y que fuese divertida pero no creía que fuera una de las favoritas. De hecho todavía ni siquiera lo considero así. Es una sección oficial muy 'tocha'».

La cinta compite con otras 31 películas de todo el mundo, entre las que se encuentra 'El hoyo', del bilbaíno Galder Gaztelu-Urrutia, que pasó por los festivales de Austin y Toronto y según destaca Moreno, «ha gustado mucho, a mí también particularmente. Hay cosas potentes, me muero por ver la nueva de Quentin Dupieux, 'Le Daim' y la de 'Noche de bodas', que puede funcionar muy bien, pero me alegra que las películas que están impactando más sean vascas, es un puntazo». El cineasta donostiarra no se olvida de 'The lighthouse' (El faro), que compitió en Perlas en el Zinemaldia. «Menos mal que está fuera de competición, porque si no estábamos en la ruina absoluta», bromea Moreno, cuyos trabajos han recibido importantes galardones, como el Mèliés de Plata al Mejor Cortometraje Fantástico Europeo por 'Cotton Candy' y el Gran Premio del Jurado en el Short Short Film Festival de Nueva York por el corto 'Bucle'.

Los elogios hacia su primer largometraje, que califica de «difícil y ambicioso» le hacen sentir «feliz» más que presionado. «Cuando terminé la película mi sensación fue de satisfacción. Estoy muy contento y orgulloso porque es lo que quería hacer y lo he dado todo. Para mí 'Ventajas de viajar en tren' supone un sueño hecho realidad. No solo por el debut en sí, sino por hacerlo de esta manera, adaptando una de mis novelas favoritas. Ahora, que funcione más o menos, o guste más o menos, no está en mis manos». Se sabrá este sábado en la entrega de premios y a partir del 8 de noviembre, en los cines.

Todo empieza por un encuentro casual de dos personajes en un tren donde uno de ellos le cuenta su vida al otro. A partir de ahí, se desencadena una sucesión de historias entrelazada cada cual más loca que la anterior. El filme está basado en la novela de Antonio Orejudo, y el partir de este material original es lo que le ha brindado tal éxito a la película, a juicio de Moreno. «La novela, que es una joya absoluta que recomiendo a todo el mundo, nos dio una base muy sólida. Luego el guionista, Javier Gullón, hizo un trabajazo, una adaptación ejemplar y precisamente ese guion fue el que nos permitió contar con ese casting de actores, que se interesaron por el proyecto. Ni en mis mejores sueños hubiera pensado tener un reparto como este (Luis Tosar, Pilar Castro, Ernesto Alterio, Belén Cuesta, Quim Gutierrez, Alberto San Juan, Macarena García, Javier Godino, Ramón Barea y Stépahnie Magnin). En el rodaje he trabajado con un equipo técnico impresionante». El haberse apoyado en la «larguísima experiencia» de Morena Films ha sido igualmente determinante para el lanzamiento del filme, así como la coproducción de Logical Pictures, «que nos ha aportado cosas súper interesantes, como toda la posproducción de sonido y de efectos, que se ha realizado en Francia».

Su próximo destino es el Festival Internacional de Tokio, donde compite también en la sección oficial, además del festival de Gijón y otros aún sin anunciar.