La Diputación acepta alegaciones y modificará el viaducto de Andoain

Esa matización llega después de que este lunes el Ayuntamiento de Andoain diera a conocer el texto con la orden foral y el informe técnico remitidos al consistorio por el departamento que dirige Aintzane Oiarbide, y en el que se recogen más de 14 propuestas de modificaciones aprobadas en este periodo de alegaciones. En total han sido 55 las alegaciones presentadas por parte del Ayuntamiento, partidos políticos, asociaciones y vecinos de la localidad. Los mismo vecinos que han mostrado su malestar protestando en la calle contra este enlace viario y que han colocado banderas contra el proyecto en sus balcones.

La alcaldesa andoaindarra Maider Lainez, señaló que estos cambios «muestran que el Ayuntamiento y la ciudadanía tenía razón y que el proyecto C2 que presentó el Departamento de Infraestructuras Viarias no es lo que Andoain necesita». Asimismo, explicó que la Diputación deberá redactar un nuevo proyecto constructivo, algo que la institución foral niega. «Algunas proposiciones se han tomado en consideración y otras, no, como en cualquier procedimiento. Las adaptaciones son pequeñas», explicó este martes Eider Mendoza.

Desde el Departamento de Infraestructuras Viarias de la Diputación señalan que «ahora se aprobará una orden foral para escribir el proyecto definitivo en los que se incluyan los cambios pertinentes, pero que en ningún caso habrá que redactar uno nuevo». Aseguran que no habrá que «realizar obras sustanciales y que el proyecto continúa con el desarrollo habitual de cualquier proyecto público». Además, añaden que todas las aportaciones –alegaciones– se valoran para la construcción final».

Entre los parámetros y modificaciones a incorporar están la cobertura parcial de la calzada sur-norte de la N-I, cubriendo la mayor longitud posible del frente de Mimendi. Además, la pared del lado oeste deberá estar abierta y con columnas. También, incorporará pantallas acústicas en el borde exterior. Asimismo deberá acoger un vial que conecte la zona de la Cruz Roja con la zona de Ama Kandida-Illarramendi. Esto mejorará la permeabilidad urbana de la zona de SAPA con un paso superior de uso peatonal-ciclista.

Las mejoras que afectan a Sorabilla serán proyectar en el sentido sur-norte de la N-I tres carriles entre los enlaces de Sorabilla y Bazkardo; y desechar la rotonda delante del barrio con un bucle de retroceso y proyectar una pasarela peatonal sobre la N-I para mejorar su conexión con el viario urbano. Asimismo, se intentará evitar la demolición del caserío Presagaina, salvo que los condicionantes geométricos o de seguridad lo hagan inviable. También se reducirán las afecciones al caserío Elizaldeaundi y se preservará el baserri Córdoba.

El proyecto de viaducto de 625 metros de longitud para Bazkardo fue presentado en junio de 2022 por la Diputación de Gipuzkoa, en una carretera que registra el paso de 70.000 vehículos al día. La obra tenía un presupuesto de 75 millones de euros, una de las inversiones más potentes en infraestructuras en el territorio en los últimos años.

En principio, la Diputación calculaba que si se cumplían las previsiones, las obras empezarían a principios de 2024 y los trabajos llevarían 28 meses, por lo que la nueva estructura estaría operativa a mediados de 2026. Cabe comprobar ahora si la inclusión de estas modificaciones en el diseño de la obra supondrán una revisión en los plazos y los gastos.