La ocupación hotelera en la ciudad alcanzó un 93% en el mes de agosto

Sonia Parada, directora del hotel ETH, aseguraba que «ha sido algo totalmente inesperado. Agosto siempre es bueno y confías en este mes, pero esta vez la afluencia ha sido muy grande, hemos estado prácticamente al cien por cien».

La procedencia de los visitantes ha sido mayoritariamente nacional. «Ha habido pocos extranjeros, como mucho franceses y portugueses de paso», añadía la directora del ETH. «Pero quienes se han alojado en el hotel han realizado un turismo muy activo, de visitar mucho la zona. Ahora, de cara a septiembre, la temporada no se ha alargado, porque para eso necesitamos turistas extranjeros, pero sí hemos recuperado los grupos tanto deportivos como de empresa».

Sonia García, del restaurante Félix Manso Ibarla, señalaba, por su parte, que «a diferencia de julio, en el que el tiempo fue peor y trabajamos menos, agosto ha sido un mes muy bueno, tanto como el del verano pasado. Ha llovido menos y hemos podido aprovechar la terraza. También hemos notado mucha afluencia de gente de fuera, sobre todo nacionales, porque el público francés es mucho menor ahora».

Este verano, la Oficina de Turismo de los jardines de Luis Mariano ha recibido un total de 2.208 visitas (1.028 en julio y 1.180 en agosto). La mayoría han sido realizadas por turistas nacionales, principalmente procedentes de Cataluña, Aragón, Comunidad Valenciana y Navarra, mientras que los visitantes extranjeros han representado sólo un 19% del total. La mayoría de las consultas realizadas en la Oficina de Turismo han girado en torno a los itinerarios o sendas en la naturaleza. En este sentido, han aumentado también las visitas al Punto de Información de Lapurriturri. Por contra, este año se han visto reducidas las consultas sobre el Camino de Santiago.

Los datos turísticos de agosto son «muy positivos», valoraba Miguel Ángel Páez, presidente de Bidasoa activa. «Este verano hemos alcanzado cifras iguales e incluso mejores que otras temporadas estivales previas a la pandemia. Esto demuestra que, como ya veníamos viendo con anterioridad, Irun se está consolidando como un destino turístico atractivo, algo que trabajaremos por mantener cuando la situación mejore».

María Serrano, vicepresidenta de la agencia de desarrollo, ponía el foco en la demanda de turismo de naturaleza. «La pandemia ha provocado que muchas personas prefieran realizar un turismo activo y en zonas naturales, al aire libre. Irun ofrece una amplia oferta en este sentido y ésta habrá sido, probablemente, una razón de peso a la hora de elegir destino por parte de las personas que nos han visitado. Sin duda, de cara al futuro, la oferta natural de Irun seguirá siendo un punto fuerte para mantener las cifras que hemos logrado este verano».

A los datos de ocupación hotelera y visitas a las oficinas de turismo, hay que añadir las cifras estivales del Museo Oiasso. La instalación ha contado con una participación de 6.631 personas durante junio, julio y agosto, entre visitantes e inscritos en las diferentes actividades, siendo el mejor dato desde el verano de 2014 (7.132).