En internet, experimentos los justos: apps para evitar ser víctima de una estafa

Iñigo Galparsoro

San Sebastián

Sábado, 11 de enero 2025, 01:00

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No, por difícil que resulte de aceptar, no estamos totalmente libres de ser víctimas de un intento de estafa o de ver cómo nuestra cuenta bancaria se queda en números rojos. Sin embargo, lo que sí está a nuestro alcance es seguir una serie de buenas prácticas a la hora de mantener nuestra privacidad a buen recaudo, además de evitar riesgos innecesarios. Estas son algunas de las herramientas que propone la Oficina de Seguridad Informática (OSI) para evitar más de un susto.

El antivirus es todo un clásico venido a menos por la considerable seguridad que ofrecen sistemas como iOS o Android. Craso error. Si navegas por webs desconocidas o de dudosa legalidad no dudes en instalar uno que detecte cualquier peligro en tiempo real. Y en el caso de que creas estar infectado, ve más allá con un cleaner. ¿Ejemplos? El Safety Scanner de Windows, las soluciones de Norton, Kaspersky, etc. Y antes de acceder a una web que no sabes si es fraudulenta o no, ponla a prueba en páginas como las de VirusTotal o URLVoid.

Son un auténtico engorro en el día a día pero cumple a las mil maravillas con su cometido. Y es que tirar de un doble factor de autenticación en determinados servicios o cuentas de email aumentará tu seguridad exponencialmente. En otras palabras, no sólo necesitarás una contraseña al uso sino también el código alfanumérico que te llegará al móvil. Con todo, si tu mayor problema es recordar el password de cada servicio, tira de un gestor de contraseñas: con sólo saberte una, tendrás a tu disposición el resto con productos como Bitwarden, LastPass y KeePass.

Sí, es un recurso muy cómodo y, sobre todo, te permite no consumir de golpe los datos de tu tarifa móvil, pero... no es nada seguro. Las WiFi públicas de los aeropuertos o bibliotecas no están libres de la codicia de los amigos de lo ajeno, de ahí que si aspiras a consultar tus movimientos bancarios o a leer un email importante, hazlo a través de una VPN: sólo así tus comunicaciones, cifradas, estarán totalmente seguras. NordVPN, Hide.me, CyberGhost o Surfshark son sólo algunas de las opciones más recomendables. Eso sí, si eres especialmente cauto con tu información, configura correctamente tu firewall. Y para acceder a cualquier dispositivo de forma remota, nada mejor que TeamViewer, AnyDesk o el Escritorio Remoto de Windows.

No te engañes: cada vez que accedes a una página web o realizas una búsqueda en internet tus datos quedan recopilados en servidores con dudosas intenciones. Por ello, es importante contar con un navegador que respete la privacidad del usuario y, sobre todo, configurar sus ajustes al máximo. Brave o Vivaldi son dos buenas alternativas aunque llevada al extremo no hay mejor opción que la de Tor Browser. Eso sí, a la hora de realizar búsquedas en internet hay opciones que apenas recopilan tu actividad, caso de DuckDuckGo o Qwant.

El eterno dilema: cuando nos deshacemos para siempre de nuestro móvil o de un portátil, ¿basta con restaurar de fábrica? No. ¿Y si apostamos por un formateo rápido? Tampoco. No te engañes: el hecho de que no veas las imágenes o vídeos en un explorador de archivos no significa que no estén aún ahí, simplemente que no se encuentran indexados. Por tanto, para hacer desaparecer los archivos se recomienda borrarlos de forma segura con continuas reescrituras, con herramientas como Eraser o Shreddit Data Eraser. Eso sí, si lo que quieres realmente es mantener tus documentos lejos de miradas ajenas opta por cifrarlos con una contraseña (EFS de Windows, Office, iWork, etc.).

A priori es misión imposible pero... es imprescindible. Y es que si quieres que tu dispositivo funcione correctamente es importante que cuente con espacio libre disponible. Para ello, apps como la popular CCleaner, TreesSize, Glary Utilities o un simple gestor de archivos (en Android o iOS) pueden ser de gran ayuda. Otra cuestión igual de importante es la monitorización de recursos del equipo: sólo así podrás corregir errores básicos, eliminar funciones obsoletas u optimizar el rendimiento del dispositivo. ¿Opciones? CPU X, Speccy, el administrador de tareas de Windows, el monitor de actividad de macOS, etc.

Sí, has acabado en el peor de los escenarios posibles: has perdido tu valiosa información. Y ahora, ¿qué? Recurre a la copia de seguridad -si la has hecho previamente- con Super BackUp o Time Machine. En caso de que no hayas sido tan previsor opta por recuperarla con un software específico (Recuva, Recoverit, Disk Drill, etc.) o directamente borrarla en remoto con Lookout, Encontrar mi dispositivo (Android) o Buscar mi iPhone (iOS).