Cerramiento de fincas: ¿qué tipo de cerramientos hay?

Por seguridad, para cumplir la legislación vigente… son muchos los motivos existentes para realizar un cerramiento óptimo de nuestra finca. Un paso que será determinante para acotar nuestra parcela y para organizar nuestro espacio exterior. La decisión debe estar bien madurada. Para ello, el mercado ofrece distintas opciones, que varían en función de aspectos tan determinantes como el presupuesto previsto, el propósito del cerramiento y el aspecto estético, que en este tipo de actuaciones tienen un papel determinante.

Como es lógico, el propietario no tiene por qué saber cuál es la mejor opción, de ahí que sea aconsejable apostar por un profesional o contratista de cercas que pueda ofrecer su punto de vista, algunas recomendaciones y estimaciones de costos específicos para cada situación. Aspectos que pueden resultar ajenos, pero que son igualmente determinantes, como el clima local, el mantenimiento necesario y las regulaciones locales, no pueden pasar desapercibidos.

A continuación, explicamos algunas de las opciones más comunes para cercar tu finca:

Las cercas de alambre son una opción económica y versátil. Puedes elegir entre alambre de púas, alambre de malla o paneles de alambre soldado. Estas se combinan con poste metálico anclado en dados de hormigón, o bien con postes de maderas locales, clavados en el suelo. Son fáciles de instalar y proporcionan seguridad básica y delimitación de la propiedad.

Las cercas de madera brindan un aspecto rústico y natural. Puedes optar por vallas de tablas, vallas de estacas o vallas de postes y rieles. Las cercas de madera se realizan con maderas tratadas, si no requieren de mantenimiento regular, como pintura o barnizado, para protegerlas de la intemperie.

Las cercas de PVC (cloruro de polivinilo) son duraderas, resistentes a la intemperie y fáciles de mantener. Vienen en una variedad de estilos y colores, imitando la apariencia de la madera o las vallas de hierro forjado. Son una opción popular debido a su durabilidad y bajo mantenimiento.

Las cercas de hierro forjado ofrecen un aspecto elegante y clásico. Son duraderas y brindan seguridad adicional. Sin embargo, las cercas de hierro forjado suelen ser más costosas y requieren de un tratamiento previo o un posterior mantenimiento para prevenir el óxido.

Son cuatro propuestas diferentes para el cerramiento de fincas, que se adaptan a todo tipo de necesidades. Es el momento de analizar cuál de ellas encaja mejor en tu finca.