«Somos más conscientes de la importancia que tiene una buena salud mental y emocional»

Ubicado en Tolosa, (paréntesis) psicología promueve la reflexión, tomarse un tiempo para el cuidado de nuestra salud mental. Al frente de este centro está el psicólogo Agus Tena González, quien explica cuáles son los problemas habituales con los que se encuentra en la consulta.

¿Qué importancia le damos a la salud mental?

Cada día somos más conscientes de la importancia que tiene una buena salud mental y emocional. Vivimos tiempos en los que se exige mucho de nosotros desde diferentes áreas, tanto en lo personal como en lo profesional, y esto genera frustración y malestar que nos lleva a preguntarnos qué es lo que va mal. A veces recibimos el mensaje de que hay que superarse continuamente y que se puede con todo, olvidando que la salud mental es un reflejo de la salud de una sociedad. No hay que confundir la salud mental con 'tirar para adelante', y de alguna manera creo que es de lo que nos estamos dando cuenta, de que las señales de sufrimiento y malestar están ahí para saber escucharlas.

¿Ha cambiado su relevancia con motivo de la pandemia?

Con la pandemia nos hemos visto en situaciones que no imaginábamos apenas unas semanas antes, y estamos viendo sus secuelas y las seguiremos viendo durante un tiempo. Llevamos ya dos años sometidos a una incertidumbre constante, sin saber a qué atenernos, y cuando nos quedamos sin horizonte afloran muchas crisis. Se ha puesto el foco desde los medios en la salud mental y me parece positivo. También nos estamos dando cuenta de la importancia que tiene hablar de ella y compartirlo. Es un gran paso en el camino de la desestigmatización y entender que lo que nos sucede está relacionado con un contexto, con una historia personal y, sobre todo, con ser humanos.

¿Cuáles son los problemas habituales con los que se encuentra? ¿Y qué señales nos pueden indicar que tenemos un problema de salud mental?

Si tuviera que citar los más habituales, diría que son la ansiedad, la depresión, los duelos y problemas de relación. Me gusta puntualizar que los problemas de salud mental son también emocionales. Si nos damos cuenta, cuando hablamos de ellos, decimos cómo nos sentimos: me siento triste, apagado, inquieto, nervioso, deprimido, etc. Nuestro estado emocional es entonces una forma de saber si algo va mal. Otras señales tienen que ver con los pensamientos y mensajes que nos enviamos a nosotros mismos, darnos cuenta de que hemos empezado a verlo todo negro, o que va a ir todo mal, o que no estamos a la altura, por poner unos ejemplos. También hay que prestar atención a conductas y hábitos: el consumo de tóxicos como tabaco, alcohol y drogas serían un ejemplo claro, y los cambios en el sueño y la alimentación. Y no podemos olvidarnos de las señales somáticas, que pueden ir desde contracturas por tensiones acumuladas, afecciones cutáneas, problemas digestivos o dolores de cabeza, por citar los más comunes.

¿Cuál es la visión que se tiene de los psicólogos? ¿Se está normalizando el hecho de acudir a un profesional de esta rama?

Creo que está cambiando la visión desde hace ya un tiempo. A la gente mayor todavía le cuesta acudir a la consulta del psicólogo, por haber crecido en una cultura con una visión estigmatizante en la que el que iba al psicólogo estaba 'loco', con toda la connotación negativa que este término ha tenido. Entre la gente más joven se ve como algo normal e incluso se considera una forma más de cuidarse y de desarrollarse.

¿Los niños también deben visitar la consulta de un psicólogo?

En relación con la anterior pregunta, quiero aclarar que los psicólogos somos trabajadores de la salud y cada vez se nos ve más de esta forma, por lo que, si un niño o niña tienen problemas, por supuesto que es recomendable acudir a un profesional con formación específica en psicoterapia infantil. Hay que tener en cuenta que muchas de las heridas que arrastramos en la vida adulta vienen de la infancia, y la prevención y la atención temprana son la mejor manera de evitarlas.

¿Cuál es su corriente psicoterapéutica? ¿Hay alguna metodología concreta?

Cada persona que acude a terapia es un mundo y como han probado numerosos estudios, el vínculo que se crea entre psicólogo y paciente/cliente es el mayor predictor de éxito terapéutico independientemente de la corriente, por lo que procuro adaptarme a las necesidades de quien pide ayuda y generar una buena sintonía, teniendo en cuenta sus circunstancias. Dicho esto, realicé el Máster en Psicología General Sanitaria, que aporta una base científica a mi trabajo, y tengo formación en Psicoterapia Humanista, que considero mi núcleo teórico, desde el cual pongo a la persona que acude a consulta en el centro del proceso, ofreciendo un espacio protegido en el que poder explorarse a sí misma y se haga dueña de su vida. La corriente Humanista me permite incorporar diferentes métodos y también trabajo desde la Terapia de Aceptación y Compromiso y su precursora, la Logoterapia de Viktor Frankl, poniendo el foco en dar sentido al sufrimiento y en identificar los valores que guían a la persona, ya que como decía Nietzsche, «quien tiene algo por qué vivir, es capaz de soportar cualquier cómo».

Más información:

Igarondo Ibilbidea, 1 (bajo, despacho 3) – Tolosa

699 608 196

info@parentesispsicologia.com

www.parentesispsicologia.com