Urkullu se queja al embajador de Reino Unido por la cuarentena

El lehendakari en funciones, Iñigo Urkullu, mantuvo en la tarde de este pasado lunes una conversación telefónica con el embajador británico en España, Hugh Elliot, para trasladarle su «inquietud y preocupación» por los efectos que tendrá para Euskadi la medida adoptada por su Gobierno y que recomienda evitar todo viaje no esencial a España. De momento, el Reino Unido no aplicará ningún tipo de excepción territorial en la aplicación de esta medida.

En esta conversación telefónica, que apenas duró unos minutos y transcurrió en un tono «cordial», según ha podido saber este periódico, Iñigo Urkullu le expuso su inquietud por una medida que no tiene en cuenta ni la diferente evolución de los rebrotes del Covid-19 en el Estado ni las medidas adoptadas por las distintas autonomías para atajarlos. Así, le trasladó que Euskadi es un destino seguro, poniendo en valor las medidas adoptadas por las autoridades sanitarias para intentar contener la propagación del virus, según desveló ayer el portavoz del Ejecutivo, Josu Erkoreka.

La decisión, única y uniforme del Reino Unido para todo británico que desee viajar a España, establece una tabla rasa que es la que preocupa al Ejecutivo vasco. Y no solo por los efectos en el sector turístico, ya bastante tocado, sino por el «efecto reputacional» que sobre la imagen de Euskadi puede proyectar en el exterior esta medida del gobierno de Boris Johnson, afectando a otros sectores esenciales de la economía vasca. «Es una medida indiscriminada e injusta que no tiene un fundamento objetivo si nos atenemos a los datos registrados hasta la fecha», criticó Josu Erkoreka.

El portavoz del Ejecutivo aludía así a los datos comparativos que desde el Departamento de Salud se van actualizando casi al minuto y que muestran cómo Euskadi mantiene unos diagnósticos positivos inferiores a otras comunidades.