El descenso de la natalidad deja 1.500 alumnos menos en Gipuzkoa, la mayoría en la concertada

Los datos desgranados ayer por el consejero vasco de Educación, Jokin Bildarratz, en la apertura oficial del curso en Euskadi confirman la tendencia ya asentada en los últimos años y que previsiblemente seguirá incrementándose en próximos cursos. Pero «una de las apuestas del Departamento es utilizar la caída de matriculaciones en clave positiva para mejorar el servicio y la calidad de la enseñanza», aseguró el responsable de Educación, quien aseveró que no sobran profesores y defendió la necesidad de un pacto educativo «para acordar entre todos los agentes los retos, objetivos y estrategias para los próximos 30 años».

En el plazo inmediato, no obstante, el reto está en emprender el tercer curso de la pandemia, con el Covid aún «presente» pese a que el 80% del alumnado de 12 a 15 años ya tenga la primera dosis de la vacuna y un 36% esté inmunizado. Y abordar «el bienestar emocional y la salud mental» tanto del alumnado como de los profesores tras un año y medio en tensión por las diferentes olas y las medidas anticovid para evitar brotes en los centros educativos. Tras agradecer la labor a los docentes, que este año deben continuar con los protocolos de prevención, el consejero apuntó la necesidad de impulsar programas para «la digitalización y el liderazgo en las aulas», de «dotar de mayor autonomía a los centros con mayor complejidad o fomentar una escuela plural e inclusiva».

El reparto de alumnado entre las dos redes educativas en Gipuzkoa se mantiene similar al curso pasado, con un ligero incremento en la pública. 61.799 estudiantes (52,3%) cursarán estudios en esta red, que pierde 193 alumnos respecto al 2020-21. Y 56.262 (47,7%) escolares están matriculados en centros de la red concertada, 1.087 menos que el año anterior. El peso de la red pública es algo superior en Educación Infantil y Primaria, y sobre todo en Formación Profesional, donde sí aumenta el alumnado respecto al curso pasado, más de un millar en el territorio, y aún no ha finalizado el periodo de matrícula. «La FP ha demostrado una gran versatilidad para adaptarse al mundo de la empresa y es una opción que resulta muy atractiva para los jóvenes, ya que un gran porcentaje encuentra una salida profesional nada más finalizar sus estudios», constató Bildarratz.

Por modelos lingüísticos, el modelo D es el mayoritario en toda Euskadi, con un 68% en toda la red educativa. Pero ese porcentaje en Gipuzkoa se eleva hasta el 83,1%, sobre todo en Infantil, Primaria y ESO. Solo en FP, el modelo D se imparte a un 39,1% de alumnos. Los modelos B y A son minoritarios con apenas un 7,5% y un 9,4% respectivamente. Además, indicó el consejero, este territorio es el único que no ofrece modelo A (mayoritario en castellano) en ningún centro público por falta de demanda.