La UE avala el proyecto de Universidad Europea impulsado desde Euskadi

El campo de juego se ensancha. Un estudiante de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU) podrá cursar un cuatrimestre en Upsala (Suecia), un curso en Gante (Bélgica) y luego investigar en Gotinga (Alemania) o en Galway (Irlanda). Con normalidad. En la ecuación también entran las universidades de Burdeos (Francia), Comenius de Bratislava (Eslovaquia), Groninga (Holanda) y Tartu (Estonia). Las nueve forman el consorcio llamado a dar un nuevo aire a la educación superior en lo que se ha definido como la Universidad Europea: diseñarán itinerarios formativos flexibles, titulaciones conjuntas, estrategias en las que estén implicadas las nueve o varias de ellas... El plan recibió ayer el aval de la Comisión Europea, al ser seleccionado en la segunda convocatoria del programa Erasmus+, dotado con 120 millones de euros. A la convocatoria se presentaron 64 consorcios y han sido considerados 24. Uno de ellos es el que incluye a UPV/EHU, que recibirá cinco millones de euros en los próximos tres años.

Siendo muy interesante la financiación, la rectora, Nekane Balluerka, destaca de manera especial el aval que supone el gesto de la Comisión en cuanto a reconocimiento del proyecto. Un proyecto que han bautizado como 'Enlight' y que nació el pasado 29 de octubre en la ciudad estonia de Tartu. Entre las nueve universidades, de otros tantos países y con implantación en 12 ciudades, suman 312.500 estudiantes.

Balluerka destaca la diversidad, lo heterogéneo y por tanto enriquecedor del grupo: hay ciudades con áreas metropolitanas que se acercan al millón de personas, y otras de menos de cien mil habitantes rodeadas de zonas rurales. Las hay costeras y continentales, del norte y del sur de Europa, del este y del oeste... Entre todas suman once lenguas diferentes. «La idea es transformar la Universidad para poder transformar la sociedad», dice la rectora. Se refiere no sólo al panorama tan diverso que se abre a los estudiantes, con todo lo que ello supone de enriquecimiento personal, sino a que el proyecto se articulará en torno a cinco retos relacionados con los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de Naciones Unidas: salud y bienestar; revolución digital e impacto de la digitalización; cambio climático; uso de la energía y economía circular; y equidad. En fin, generar competencias para que los estudiantes se conviertan en gente comprometida. Lo que vendría a significar pasar de ser personas a ciudadanos, en términos aristotélicos.

Para Nekane Balluerka «el reconocimiento por parte de la Comisión de nuestro modelo de Universidad Europea abre grandes posibilidades de colaboración académica y de proyección de nuestra docencia, nuestra investigación y nuestra transferencia». En cuanto al alumnado, 'Enlight' «va a favorecer, entre otras cosas, itinerarios de aprendizaje flexibles basados en retos, la interacción constante con diversos actores internacionales y locales y nuevas formas de movilidad internacional. En breve podremos anunciar la puesta en marcha de iniciativas concretas».

Estos primeros pasos no serán titulaciones conjuntas porque para que éstas sean posibles es necesario un recorrido administrativo farragoso. Pero «la movilidad» entre estudiantes «empezaría a partir del próximo curso» mediante la habilitación de itinerarios curriculares. La rectora también se refiere a la celebración de seminarios entre personal investigador. Ya hay una reunión convocada el próximo lunes entre los rectores de las nueve universidades.

También hay que notar que en ese club confluyen viejos conocidos. Así, las universidades de Upsala, Groninga, Gante y Gotinga ya formaban un consorcio, de modo que llevan tiempo trabajando de manera conjunta. Por su parte, la relación entre la UPV/EHU y la de Burdeos es bien conocida. Balluerka destaca el músculo investigador del conjunto y da por muy bien aprovechado el año que se pasaron conformando el equipo. «Se nos abre un campo amplísimo que va a repercutir de un modo muy positivo en el conjunto de la sociedad vasca».