La alta demanda en las haurreskolak del centro de Donostia e Irun deja a 71 familias sin la plaza deseada

71 familias guipuzcoanas se han quedado sin plaza para sus hijos en las haurreskolak públicas de cara al próximo curso. La publicación ayer de las listas definitivas por parte del Consorcio de Haurreskolak -el ente que gestiona esta red educativa junto a los ayuntamientos- ha dejado sin sus opciones deseadas a estas familias que, eso sí, «aún pueden lograr una plaza de aquí a septiembre», matizan fuentes del departamento de Educación a este periódico.

Donostia, Irun y Bilbao vuelven a ser las zonas más tensionadas en cuanto a oferta y demanda de plazas. Además de los 71 niños guipuzcoanos que se han quedado sin sitio en la red pública de las haurreskolak -gratuita desde el pasado curso-, en la capital vizcaína hay otros 136 pequeños sin plaza.

Para el curso que arrancará el jueves 5 de septiembre el Gobierno Vasco había ofrecido en la campaña de matriculación 8.812 plazas, de las cuales han quedado ocupadas 5.173. Las 3.632 plazas que han quedado desiertas en Euskadi evidencian que hay sitio de sobra en la gran mayoría de las localidades vascas. El problema se da en las capitales, donde se ha vuelto a demostrar que la demanda en algunos barrios (como en el Centro de Donostia) supera ampliamente a la oferta. En el caso de San Sebastián, fuentes del Ayuntamiento de San Sebastián aseguraban a este periódico en junio que se va a abrir una nueva haurreskola en el barrio de Riberas de Loiola, «con la previsión de que abra sus puertas en septiembre de 2025 y que cuente con alrededor de 45 plazas», aunque otras fuentes cercanas al proyecto apuntan a que esa cifra «podría superar las 50». La apertura de este nuevo centro aliviaría ese tensionamiento de plazas, sobre el cual el Gobierno Vasco «ya trabaja con el Consorcio y los Ayuntamientos afectados para poder crear más plazas», indican fuentes del departamento de Educación que ahora lidera Begoña Pedrosa, quien ha sucedido en el cargo a Jokin Bildarratz. En este sentido, cabe destacar que en Astigarraga el año pasado varios niños consiguieron plaza tras un acuerdo entre el Ayuntamiento y el Consorcio de Haurreskolak, después de que en un principio no tuvieran sitio.

En la capital del territorio se ofertaron un total de 575 plazas entre sus 11 centros, de las cuales quedaron ocupadas 497. En lista de espera se han quedado 48 familias (la mayoría de ellas en los barrios más céntricos), más del doble que las 23 de Irun, aunque la localidad fronteriza tiene muchos menos habitantes que Donostia.

Algunos de los factores que pueden estar detrás de los cambios que han sufrido las listas provisionales respecto a las definitivas son las reclamaciones efectuadas por familias que consideraban que habían calculado mal su puntuación en la baremación y, asimismo, la cifra de familias «excluidas» por haber entregado de forma errónea la documentación para realizar la inscripción, que han pasado de 109 a las 39 de ahora.

Por su parte, el Partido Popular vasco anunció ayer que va a solicitar al Departamento de Educación del Gobierno Vasco que «concierte la Escuela Infantil de 0 a 2 años, de la misma manera que se conciertan el resto de tramos de edad». Según expusieron, «no se puede quedar ni una sola familia fuera de la escuela infantil si lo ha solicitado».

En una rueda de prensa celebrada en el Parlamento Vasco, la parlamentaria Muriel Larrea denunció que «en este momento la Escuela Infantil se ha decretado como gratuita de 0 a 2 años, pero el Consorcio Haurreskolak no es capaz de absorber toda la demanda de este servicio, que es muy necesario para la conciliación de las familias vascas». Además, solicitarán que se concierten los servicios de «acogida temprana a los madrugadores o por la tarde para las familias que tienen necesidad de esos servicios para poder conciliar su vida laboral con la vida familiar».