Los conflictos sacuden Osakidetza
La dimisión del director de Emergencias, el cese de la responsable de Salud Pública y la OPE marcan a Darpón
Con nubarrones. Así está siendo este final de año para Osakidetza y el Departamento vasco de Salud. Las buenas noticias médicas que llegan por una parte son solapadas por conflictos laborales y renuncias en cargos claves de un departamento que desde hace meses soporta la alargada sombra de las supuestas filtraciones que han afectado a su OPE. El liderazgo del Servicio Vasco de Salud en el diagnóstico precoz y tratamiento del cáncer de mama, la apertura del nuevo Hospital de Eibar o la celebración de los 35 años de andadura de Osakidetza están coincidiendo en el tiempo con la dimisión de su cargo del director gerente de Emergencias, Txema Unanue, y el cese este pasado martes «a petición propia» de la directora de Salud Pública del departamento, Miren Dorronsoro, después de treinta años de servicio en Osakidetza. Estos dos últimos casos se suman a las sospechas de amaños que planean sobre una veintena de pruebas de la Oferta Pública de Empleo que sigue investigando la Fiscalía del País Vasco, tras las denuncias presentadas por los sindicatos ELA, LAB y ESK, y el Ararteko. La gravedad de las acusaciones, Elkarrekin Podemos ha llegado a pedir el cese del consejero de Salud Jon Darpón, hizo que el lehendakari Iñigo Urkullu tuviera que salir en su defensa para destacar que el consejero ha realizado un trabajo «responsable y transparente». Tras la investigación interna realizada por Osakidetza finalmente se repetirán cinco exámenes de tres especialidades médicas.
El último capítulo que ha sacudido a Osakidetza tuvo lugar este pasado martes. El Gobierno Vasco anunció que Miren Dorronsoro, directora de Salud Pública del Departamento vasco de Salud, fue «destituida a petición propia, por motivo de su jubilación». Su marcha se produce días después de conocerse que un grupo de funcionarios la habían denunciado por «violencia psicosocial», según denunció el sindicato ELA. Ante esta situación, el departamento que dirige Jon Darpón quiso dejar claro que la marcha de Dorronsoro se produce «a petición propia», por motivos de una jubilación que debía haberse producido hace tiempo, y que en «ningún caso guarda relación alguna» con la queja realizada contra ella por seis trabajadores del área. «La decisión de solicitar su cese al cumplir los 65 años era una cuestión conocida por el Departamento vasco de Salud y sus trabajadores desde hacía meses», señalaron fuentes del departamento a este periódico.
Tras tener constancia de estas denuncias, desde el área que dirige Darpón, reconocen que desde la viceconsejería de Salud y la Dirección de Régimen Jurídico se pusieron en contacto con las personas afectadas y con Miren Dorronsoro para la apertura de «un procedimiento tipo», como marca el protocolo en estos casos, para evaluar el «nivel de riesgo psicosocial», un proceso que «es confidencial e interno». Desde ELA se considera que la destitución de Dorronsoro puede estar relacionada con estas denuncias, en las que el sindicato ha afirmado que «subyace» un posible caso de «acoso» laboral. Además, Eva Blanco, parlamentaria de EH Bildu, ha registrado una pregunta en la Cámara vasca dirigida al consejero para que aclare las medidas que ha tomado para investigar la denuncia y resolver el problema.
El Gobierno Vasco «agradeció» en la jornada de ayer a Dorronsoro «la labor que ha desarrollado durante su dilatada carrera tanto en el Departamento de Salud como en Osakidetza a lo largo de los últimos 30 años» y a la vez destacó que «ha sido la principal impulsora del Plan de Salud 2013-2020 del Plan de Menores y Alcohol, y de las iniciativas de Alimentación Saludable para Euskadi». El médico bilbaíno Juan José Aurrekoetxea relevará en el cargo a Dorronsoro. Especialista en Medicina de Trabajo y en Medicina Preventiva y Salud Pública, es funcionaria del Departamento vasco de Salud e investigador de Biodonostia.
La semana pasada tampoco estuvo exenta de sobresaltos para la dirección del departamento. El viernes 26 se supo que el director de Emergencias, Txema Unanue, presentó su dimisión por no estar de acuerdo con el plan del Departamento vasco de Salud de concentrar en Txurdinaga (Bilbao) los centros de coordinación de los tres territorios vascos. Este movimiento significaría que la central de las llamadas para movilizar ambulancias para todo Euskadi estaría en la capital vizcaína. Fuentes del Departamento de Salud confirmaron este cese y desde Osakidetza aseguraron que el proyecto de unificación del Centro de Coordinación del servicio de Emergencias es «un estudio de posibilidades» sobre el que no ha tomado «ninguna decisión».
El Departamento vasco de Salud no ha tardado mucho tiempo en buscarle sustituto a Unanue en la dirección de Emergencias. Según informa María José Carrero, el hasta ahora coordinador del servicio en Álava, Mariano González, es la persona elegida de forma provisional en tanto el Servicio Vasco de Salud «procede a la cobertura reglamentaria del puesto mediante una convocatoria que se publicará convoca en el Boletín Oficial del País Vasco».
Por último, la OPE que iba a «estabilizar» cerca del 95% de la plantilla de Osakidetza y en la que participaron más de 17.000 guipuzcoanos entre mayo y junio sigue bajo sospecha. El Servicio Vasco de Salud realizó una investigación interna y concluyó que hay que repetir cinco exámenes en tres especialidades médicas, además de paralizar la prueba de Traumatología tras conocerse que seis de los miembros del tribunal mantuvieron una «reunión secreta» fuera de los protocolos habituales.
