Una cardióloga aclara el mito de una copa de vino tinto y su efecto en el corazón
La cardióloga Magdalena Perelló aborda esta cuestión desde la evidencia científica, despejando dudas sobre si esta creencia popular es un mito o una realidad
L. G.
Lunes, 25 de noviembre 2024, 11:45
La afirmación de que el consumo moderado de vino tinto beneficia al corazón ha sido motivo de debate durante décadas. La cardióloga Magdalena Perelló aborda esta cuestión desde la evidencia científica, despejando dudas sobre si esta creencia popular es un mito o una realidad.
«En los años 80, estudios realizados en poblaciones mediterráneas, donde el consumo de vino tinto es habitual, mostraron tasas más bajas de enfermedades cardiovasculares. Esto llevó a investigar las propiedades del vino tinto, y los resultados apuntaron a los polifenoles, compuestos antioxidantes presentes en la piel de las uvas», ha explicado al especialista de corazón.
Según la cardióloga Magdalena Perelló, «se vio que en la piel de las uvas del vino tinto había una serie de moléculas llamadas polifenoles, que tenían unas propiedades antioxidantes y antiinflamatorias, protegiendo el endotelio de los vasos sanguíneos y mejorando el perfil lipídico». Estas características podrían explicar los beneficios observados en la población mediterránea en relación a la salud cardiovascular.
Sin embargo, investigaciones más recientes han cuestionado esta perspectiva. La cardióloga subraya que en una revisión de 2018 y en informes recientes de la Organización Mundial de la Salud, se ha alertado de los riesgos del consumo de alcohol: «El consumo de alcohol está asociado a más de 200 enfermedades, entre ellas enfermedades cardiovasculares, enfermedades hepáticas y algunos tipos de cáncer».
La OMS señala que no existe un nivel de riesgo seguro
Además, la OMS señala que no existe un nivel de riesgo seguro, ya que incluso el consumo moderado puede tener consecuencias negativas para la salud. Como explica la especialista, «tras sopesar los beneficios y los riesgos, hoy en día no recomiendan a la población general el consumo de alcohol».
A la luz de la evidencia actual, la cardióloga Perelló insiste en que, aunque el vino tinto contiene compuestos beneficiosos, «los riesgos asociados al consumo de alcohol superan con creces los posibles beneficios cardiovasculares». Por esta razón, no se aconseja incluir alcohol en la dieta para mejorar la salud del corazón.