El barrio con quinientos años de historia donde el alquiler cuesta 88 céntimos a cambio de tres oraciones al día
Cerca de 150 personas conviven en este complejo residencial por menos de un euro al año
J.M.
Martes, 25 de noviembre 2025, 06:57
Vivir de alquiler por 88 céntimos al año. Esa es la realidad que experimentan cerca de 150 personas en el barrio de Fuggerei, un complejo de vivienda social fundado en 1521 en el corazón de la ciudad alemana de Augsburgo donde sus residentes pagan una renta simbólica que sigue intacta desde hace cinco siglos.
Construido por el banquero Jakob Fugger, el vecindario fue proyectado como una obra de caridad para los habitantes más necesitados de la ciudad, donde por un florín renano las personas más humildes de Augsburgo podían contar con un techo en el que establecerse.
Habitado todavía a día de hoy, el barrio está formado por alrededor de 67 edificios y 142 viviendas donde viven cerca de 150 personas organizadas como «una pequeña ciudad dentro de la ciudad», con iglesia y patios comunitarios.
La gestión corre a cargo de la fundación vinculada a la familia Fugger, cuyos activos e inversiones históricas financian el mantenimiento del conjunto y permiten mantener la renta simbólica.
Un euro al año de alquiler a cambio de tres requisitos
Para vivir en Fuggerei, sus residente deben cumplir tres requisitos básicos que siguen vigentes hoy en día y que consisten en demostrar necesidad económica, ser católico y haber residido en Augsburgo un tiempo mínimo, establecido en la actualidad en al menos dos años de residencia. Además, los moradores aceptan una práctica tradicional de rezar tres oraciones diarias —el Padre Nuestro, el Ave María y el Credo— por el alma de los benefactores, si bien diferentes reportajes han explicado que no existe un control establecido sobre estas prácticas y que depende del proceder individual de cada residente.
Fuggerei también conserva normas históricas de convivencia como un toque de queda que obliga a regresar antes de las 22.00 horas al complejo aunque muchas de las reglas tradicionales han sido adaptadas a la realidad moderna.
Fuggereis como modelo de vivienda social
Además de su interés turístico e histórico, el modelo del complejo Fuggerei ha suscitado una enorme atracción entre sociólogos, urbanistas y administraciones públicas en torno al debate sobre vivienda social y patrimonio.
Así, medios internacionales y análisis económicos han destacado cómo el legado financiero de la familia Fugger, gestionado a través de una fundación, ha permitido mantener un programa estable durante siglos, algo poco habitual en contextos urbanos actuales.