Más de un 15% de la población padece una enfermedad digestiva crónica

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La enfermedad celiaca afecta a un 2% de la población, las dispepsias a un 8%, el síndrome de colon irritable a otro 8%, el estreñimiento crónico casi a un 6% y los virus de las hepatitis a un 2%. Estas son algunas de las patologías, pero no todas, por lo que si se tiene en cuenta todo el conjunto se estima que entre un 15% y un 20% de los ciudadanos tiene una afección digestiva crónica. «Si se van sumando todas las patologías te das cuenta de que poca gente se libra de estas dolencias». Así lo explica el médico Luis Bujanda, profesor de la UPV/EHU y presidente de la Asociación Española de Gastroenterología.

Esta agrupación, coincidiendo mañana con el Día Mundial de la Salud Digestiva, quiere reivindicar y concienciar a la población de «la necesidad de llevar unos hábitos de vida saludable y acudir a consultas de atención primaria ante la aparición brusca de síntomas digestivos que no remiten en una o dos semanas, especialmente entre las personas mayores de 50 años», a los que también les apremia a que «participen en los programas de cribado de cáncer colorrectal».

El presidente de la Asociación Española de Gastroenterología divide estas patologías en cuatro apartados: problemas de hígado, tumores digestivos, enfermedades inflamatorias intestinales (Crohn y colitis ulcerosa) y los trastornos funcionales. Estos últimos son «los más habituales en Gipuzkoa». En este apartado se enmarcarían las enfermedades de dispepsia, colon irritable y estreñimiento, entre otras. «Son afecciones benignas, pero que afectan notablemente la calidad de vida de aquellas personas que las sufren», aclara. Algunas de ellas, por ejemplo en el colon irritable, no pueden aguantar la necesidad de ir al baño, un episodio que se puede producir varias veces al día, lo que se traduce muchas veces en una incapacidad de hacer una vida normal, además de la angustia que ello conlleva.

El médico del Hospital Donostia aconseja a modo preventivo, «además de comer despacio y masticar bien, ingerir pequeñas cantidades de alimentos, y que sean fácilmente digeribles por nuestro organismo», así como «evitar condimentos, grasas, comidas copiosas, con gas, estimulantes y el consumo exagerado de antiinflamatorios». Asimismo, concreta que «la gente suele cenar mucho, por lo que hay que procurar reducir la ingesta de alimentos por la noche y hacerlo como mínimo dos horas antes de irse a la cama».

Los tumores digestivos representan «los más importantes en cuanto a pérdida de años de vida» en el campo de la salud digestiva. Cada año se detectan 56.000 nuevos casos en España de cánceres en el aparato digestivo (colon, estómago, hígado, páncreas, vías biliares, etcétera) y 33.000 muertes. A modo preventivo «se puede actuar en dos áreas». En primera instancia, Bujanda avala que las personas apliquen hábitos de vida saludable, con lo que recomienda «seguir una dieta mediterránea, rica en frutas y verduras, y abandonar el tabaco y el consumo excesivo de alcohol». Pero también «hay que hacer ejercicio físico, para no engordar». Como medida secundaria se encuentra «el participar en los programas de cribado como en el caso del cáncer de colon para los mayores de 50 años».

En otra instancia estarían los problemas de hígado, causados por la hepatitis C y, sobre todo, la obesidad, que «afecta mucho al sistema hepático en cuanto a que acumula mucha grasa y conlleva que funcione mal». El médico alerta de que «más del 50% de la población tiene sobrepeso u obesidad. Se dice que la esteatosis hepática, también conocida como hígado graso, va a ser una la enfermedad hepática más prevalente en los próximos años».

En este campo «hay que insistir en medidas, tanto alimenticias y de actividad física, que no hagan aumentar el peso de la persona». «En los países subdesarrollados el problema es que no tienen comida y aquí, en cambio, lo hacemos en exceso, comemos de más, por lo que engordamos y encima nos sienta mal», especifica.

Buena educación sanitaria

Bujanda afirma que en Gipuzkoa «la población tiene muy buena educación sanitaria, y contamos con un sistema sanitario de calidad». Al respecto de la primera cuestión, explica que «los guipuzcoanos, en general, están preparados para tomar medidas correctas ante trastornos gastrointestinales puntuales, como un estreñimiento en un determinado momento, una diarrea o una dispepsia aguda, gracias a su educación sanitaria general».

«Saben afrontar estos casos, pero si no resuelven su afección en unos días, tienen que acudir al médico de familia», señala. «En general, con la red sanitaria que tenemos podemos dar una cobertura muy buena a toda la problemática que hay en torno al aparato digestivo», recalca el experto en este campo. No obstante, reconoce que «la mayoría de los trastornos digestivos no son operables, se curan o alivian con medidas relacionadas con la alimentación, formas de vida y fármacos».