Un supuesto pique entre dos BMW causó un siniestro mortal en Bizkaia
El conductor, un santurtziarra de 26 años que podría ser acusado de un delito de conducción temeraria, ya ha sido dado de alta
silvia osorio
Viernes, 19 de junio 2015, 22:21
La imprudencia al volante puede costar muy caro. Así parece que les pasó el pasado miércoles a A.V.P. y J.R., dos amigos de Santurtzi de 26 y 25 años, respectivamente, a quienes, según apunta la investigación, pisar de más el acelerador por la carretera que enlaza la localidad marinera con Zierbena les deparó un fatal desenlace. Según ha podido saber este periódico, un supuesto "pique" con otro vehículo de la misma marca BMW conducido por otros dos jóvenes, también residentes en el municipio marinero, pudo provocar el accidente en el que pereció el copiloto del turismo siniestrado, que se salió de la calzada a la altura de la rotonda de CLH, en la zona conocida como El Calero, y se precipitó por un barranco de más de cien metros.
El conductor del vehículo, trabajador del Puerto de Bilbao, resultó herido leve, aunque tuvo que ser trasladado de urgencia al hospital de Cruces. Ayer por la mañana ya había sido dado de alta. Agentes de la Ertzaintza le tomaron declaración en el mismo centro sanitario y, a falta de confirmación por parte del Departamento de Seguridad del Gobierno vasco que realiza el atestado, en las próximas horas podría ser acusado de un delito de conducción temeraria y otro contra la seguridad vial.
Los agentes investigan si la excesiva velocidad a su paso por una vía en la que el límite es de 50 kilómetros/hora pudo haber sido la causa del accidente. De hecho, la calzada quedó sellada con varias y contundentes huellas de frenado por el derrape del coche. Al parecer, y según las mismas fuentes, el propietario acumula varias multas por infracciones similares, así como por no tener la documentación al día.
Los dos amigos quedaron atrapados en el interior del BMW, pero sólo uno logró sobrevivir. J.R. se dejó la vida en el talud, a consecuencia de las heridas sufridas en el impacto. Aunque los servicios sanitarios trataron de reanimarle, acabó pereciendo entre el amasijo de hierros en que se convirtió el flamante automóvil en el que viajaba. Su compañero ya se encuentra en su domicilio. Pese a que el miércoles por la noche fue trasladado al hospital baracaldés, su estado no precisó ingreso en planta, tal y como confirmó ayer un portavoz del centro sanitario
Llamada al 112
Quienes corrieron mejor suerte fueron los ocupantes del segundo vehículo presumiblemente involucrado en el suceso, otro BMW de un modelo más antiguo que el siniestrado. Se sospecha que pudieron ser ellos precisamente quienes alertaron al 112. Cuando los equipos de emergencia hicieron acto de presencia en el lugar, los ertzainas se interesaron por este vehículo.
Al ser ambos coches de alta gama, y ante las evidencias de un supuesto exceso de velocidad dejadas sobre el asfalto, se barajó inicialmente la posibilidad de que los jóvenes implicados en el suceso estuvieran participando en una carrera ilegal, y que éstas fueran habituales por la zona. Sin embargo, medios oficiales de la Policía local de Santurtzi declararon no tener constancia de estas prácticas temerarias "en todo el municipio", y los vecinos del barrio de San Juan, el más cercano al lugar del siniestro, tampoco han denunciado nada al respecto.
"Jamás hemos oído nada. Sí que a veces pasan algunos coches lanzados, pero nada más. De hecho, no tenemos ni quejas por ruidos", indicaron desde la Asociación de Familias de San Juan de Rompeolas. Por su parte, los vigilantes de la obra del nuevo barrio que se construye en el antiguo solar de CLH han tenido que llamar en alguna ocasión al 112 para alertar sobre turismos con conducción negligente por la carretera. Pero, según la información recogida por este diario, se trataría de "algún caso puntual" y sin mayores consecuencias, aunque el miércoles resultaran nefastas.