Dbizi se sitúa entre los cinco mejores sistemas de alquiler de bicis del Estado según la OCU
La Organización de Consumidores señala, sin embargo, que el servicio es mejorable y debería repartirse de forma más uniforme por la ciudad
Sin apenas haber cumplido todavía un año de vida, el servicio público de alquiler de bicicletas de la ciudad Dbizi se ha sumado un ... tanto al colocarse entre los cinco mejores del Estado. Al menos así lo considera la Organización de Consumidores y Usuarios que ha comparado los sistemas de transporte en bici de 14 ciudades españolas, situando a la capital guipuzcoana en cuarta posición, por detrás de capitales como Sevilla, Valencia y Barcelona, y solo por delante de Zaragoza.
La OCU ha detectado que solo en estas cinco urbes hay «un número suficiente de estaciones de alquiler en una red bien repartida por ciudad» y considera que alcanzan un nivel «realmente bueno». Ahora bien, el análisis revela «significativas» diferencias en la distribución y alcance de las estaciones de bicicleta pública, también entre las que están en ese 'Top 5'. «Idealmente, deberían repartirse de manera uniforme por toda la ciudad y a no más de 300 metros unas de otras», apuntan desde la entidad.
En este sentido, señalan que solo Sevilla, Valencia y Barcelona logran este objetivo, además de disponer de un buen número de estaciones por cada 100.000 habitantes: 38, 35 y 31 respectivamente. «Zaragoza y San Sebastián también ofrecen un servicio más que aceptable en este sentido, aunque son mejorables», añaden.
Las claves
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Ranking Solo Sevilla, Valencia y Barcelona cumplen con los requisitos de cantidad y distancia entre estaciones
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Distribución «Los puntos de alquiler no deberían estar a más de 300 metros las unas de las otras», indica la OCU
La capital guipuzcoana cuenta a día de hoy con 46 estaciones, con un total de 317 bicis mecánicas (de color azul) y 120 eléctricas (verde), frente a los 16 puntos que había con el anterior sistema. Un salto cuantitativo y cualitativo importante, pero que se queda en un ratio de 24 por 100.000 habitantes. La concejala de Movilidad, Pilar Arana, recuerda que «el objetivo es que en una segunda fase el sistema se amplíe, fundamentalmente hacia la zona Este: Bidebieta, Herrera, Altza, etc.».
Eso sí, está infinitamente mejor que otros puntos como Córdoba, donde el sistema es prácticamente testimonial, con un total de 4 estaciones para toda la ciudad (una por 100.000 habitantes). Vitoria-Gasteiz se queda a la cola porque no ofrece este servicio «aunque hay posibilidad de alquilar bicicletas en algunos parques». Por su parte, Bilbao se sitúa en sexta posición con un ratio de 12 puntos de alquiler por cada 100.000 ciudadanos (43 en total).
Diferentes costes
Otro de los puntos fuertes de la capital hispalense frente a Donostia es el coste, pues allí, así como en Valencia, no hay que pagar por la primera media hora de uso, mientras que en San Sebastián el coste es de 40 céntimos en las eléctricas y 20 en las convencionales. En Madrid, por su parte, para usar las bicis eléctricas (única opción) hay que pagar por el primer tramo de 30 minutos 50 céntimos y en Barcelona 35. «Este coste ocasional puede desincentivar su uso», advierte el informe.
Ahora bien, todas las ciudades analizadas exigen darse de alta para usar el servicio y cobran un abono anual medio de 30 euros: 35 euros en el caso de Donostia, 33 en Sevilla, 29 en Valencia, 50 en Barcelona y 37 en Zaragoza. En Córdoba el abono es gratuito y en Málaga solo cuesta 10 euros, aunque también son dos de las ciudades con una menor oferta de bicis y estaciones.
Sea como sea, en nuestra ciudad el nuevo Dbizi, bajo la gestión de Dbus y puesto en marcha en diciembre del año pasado, ha sabido atraer a muchos usuarios. Actualmente tiene en torno a 6.000, más del doble del récord del anterior sistema, establecido en septiembre de 2018 en 2.854 usuarios.
El alza no solo se registra en el número de abonados, también en el de viajes realizados. En sus primeros seis meses de existencia se han contabilizado 192.698 trayectos, lo que supera aproximadamente en un 60% los datos del mismo periodo de 2019 (no se compara con 2020 porque se suspendió el servicio con ocasión del primer estado de alarma). Asimismo, tres de cada cuatro usos se hacen con las bicicletas eléctricas frente a las convencionales.
«Debería llegar a más barrios y a centros de trabajo»
La valoración positiva que hace la OCU del nuevo servicio Dbizi también la comparten los miembros de la asociación ciclista Kalapie, si bien recuerdan que hay algunos elementos que se deben mejorar. El principal es «tener más bicis y estaciones, llegar a más barrios y, sobre todo, a centros de trabajo como Zuatzu, Miramon y el Polígono 27», apunta Gorka Hoyos, presidente de la entidad. También considera necesario «ampliar el número de parkings y que se estudie la posibilidad de extender el servicio a otras localidades de Donostialdea, su integración en el sistema Mugi, así como la incorporación de sillitas para niños en algunas de las bicis».
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