Donostia ya tiene 1.000 viviendas en construcción

Además, en los próximos meses se espera que arranquen los trabajos sobre el terreno en Illarra, ámbito en el que se prevé la creación de otros 262 pisos. Y para antes de final de año se confía en el inicio de la promoción de Igara, con 252 viviendas programadas, un 40% de ellas protegidas. Con estas dos actuaciones, el número de viviendas en desarrollo se ampliará a más de 1.500.

La actividad en el Infierno es frenética. El martes se procedió a desalojar de okupas los pabellones y edificios abandonados de esta zona de Ibaeta, dos de los cuales fueron derribados el mismo miércoles. Este jueves comenzaron las labores de retirada de los tejados de uralita en los que se ha detectado amianto. Es un proceso delicado que debe hacerse en base a un plan autorizado por el Gobierno Vasco, que es la institución competente en la materia. Esta operación concluirá este viernes, según el cronograma que manejan las promotoras Amenabar y Altuna y Uria, de modo que el próximo lunes podrán acometerse más demoliciones.

Los números 12 y 14 del camino de Zubiberri, situados en el extremo sur del ámbito, ya son historia y el número 4 (antigua sede de Oscariz Iluminación) será el siguiente en caer. Cuando finalicen las tareas de descontaminación, las excavadoras echarán abajo los números 6, 8 y 10 de esta calle, que conduce a la desaparecida casa que dará nombre al futuro barrio.

Una vez preparado el solar, llegará la fase constructiva propiamente dicha. Será dentro de unas semanas, con el año 2027 como primer objetivo en el horizonte, ya que es cuando se empezarán a entregar las llaves a los nuevos vecinos.

Antes, la Junta de Gobierno Local del consistorio deberá aprobar el acuerdo de reparcelación del ámbito, algo que ocurrirá previsiblemente este mismo mes. Este es el último escollo administrativo previo al inicio de las obras de excavación, cimentación y urbanización.

El proyecto prevé 9.975 metros cuadrados de techo de actividades terciarias, de los que 8.130 metros cuadrados se edificarán en dos bloques al sur del ámbito, junto al camino de Zubiberri que comunicará la zona con Zuatzu, y los otros 1.845 metros cuadrados se ubicarán en la planta baja de los cuatro edificios de viviendas, que tendrán alturas de 7, 8 y 13 plantas.

El desarrollo urbanístico dará continuidad a Errotaburu y a su eje viario principal, la calle Xabier Lizardi, que ahora desemboca en un fondo de saco y que en el futuro se prolongará por las nuevas viviendas y enlazará con una rotonda que se construirá en la avenida de Tolosa. Esta nueva glorieta sustituirá al cruce semaforizado actual y aproximará la boulevarización de Añorga al eje ya formado por el vial que une las áreas de Errotaburu, Lorea y Benta Berri.

La urbanización de las 6,6 hectáreas de superficie que ocupa el Infierno incluye la regeneración de la regata de Añorga mediante la apertura a cielo abierto de otros 478 metros de su cauce. Será necesario excavar 40.494 metros cúbicos de tierra y se emplearan 52.973 metros cúbicos para rellenos. El presupuesto de la urbanización asciende a 13 millones de euros.

Al norte del ámbito, el nuevo ordenamiento consolida la actual gasolinera existente (Repsol) con 470 metros cuadrados construidos, y el concesionario de Opel y Volkswagen/Audi, de 7.800 metros cuadrados de edificabilidad, al que se conceden otros 1.200 metros cuadrados para una posible ampliación.