Vuelve el belén de la Plaza Gipuzkoa
Olentzero, Reyes Magos, tropas romanas, la Anunciación, el portal de Belén, gallinitas… forman el emblemático y tradicional conjunto navideño
el diario vasco
Lunes, 2 de diciembre 2019, 16:05
La Navidad está cada vez más cerca y su ambiente ya se respira en San Sebastián. Una prueba es que tanto niños como adultos pueden admirar un año más el Belén de la Plaza Gipuzkoa, frente a la sede de la Diputación.
Olentzero, Reyes Magos, tropas romanas, la Anunciación, el portal de Belén, gallinitas… forman el emblemático y tradicional conjunto navideño.
La iniciativa surgió en 1957 de manos de Pedro Arana, que era teniente de alcalde del Ayuntamiento de la ciudad y responsable del CAT. Se reunió con comerciantes de la ciudad y pensaron que el mejor sitio para colocar un emblemático belén navideño era la céntrica Plaza Gipuzkoa.
Arana contactó José Luis Usabiaga, que era el encargado de construir y montar un belén en los bajos del Ayuntamiento de San Sebastián. Contó, además, con la colaboración del artista donostiarra Rafael Munoa para la elaboración de los personajes. Se instalaron doce figuras en el reloj floral de la plaza. Alcanzó tal éxito que en 1958 se aumentó el número de figuras y escenas representadas. Así, aparecieron el Nacimiento, los Reyes Magos, el Palacio de Herodes... y hasta una escena de un pueblo vasco. El conjunto se iluminó con tubos fluorescentes y bombillas coloreadas. Cientos de personas, incluido el obispo, acudieron al acto inaugural. Varios coros de jóvenes de las distintas parroquias y txistularis interpretaron villancicos tradicionales. Posteriormente no faltó la actuación del Orfeón Donostiarra.
En 1986 se acordó que la Asociación Belenista de Gipuzkoa se hiciera cargo del belén. Las figuras pasaron de 90 centímetros a 1 metro, y se respetó el estilo. No se correspondían las figuras con los decorados, por eso se crearon escenarios y se vistió a los personajes con prendas de gran colorido y fantasía.
En 1990 Kutxa patrocinó a la Asociación Belenista de Gipuzkoa, y Diosdado Juaniz y Juan Salsamendi fueron los encargados de construir y montar un nuevo belén. Contaba con siete escenas: la Anunciación de la Virgen María, Buscando posada, El nacimiento, la Anunciación a los pastores, el palacio de Herodes, los Reyes Magos y Olentzero. En la actualidad cuenta con más de un centenar de figuras.
El belén de la Plaza de Gipuzkoa no se salva de los actos vandálicos. Todos los años sustraen al niño Jesús o bien se llevan la pipa de Olentzero, txapelas de los baserritarras, los cascos de los romanos e incluso el brazo de algún personaje que después ha aparecido en la Parte Vieja.
El belén se retira el día 7 de enero y los dos meses siguientes se los pasan arreglando desperfectos, desnudando los personajes para lavarles la ropa o pintando caras si hace falta. Las manos son uno de los elementos que más hay que reparar.