

Secciones
Servicios
Destacamos
Sergio Gómez (Badalona, 2000) solo se ha quedado sin jugar un partido esta temporada. Es indispensable para Imanol pese a que es un recién llegado ... a la Real.
– ¿Cómo está?
– Bien, la verdad. Está siendo una semana rara, pero vale para trabajar y meter cansancio en las piernas, que es lo importante. En la última ventana estuve con la selección, pero hay que estar preparado para todo.
– En Zubieta se suele decir que las semanas de parón con Imanol son todavía más cañeras.
– Y tanto, saca el látigo. Intenta aprovechar para meter kilómetros y compensar con los días de descanso. Durante la rutina apenas tienes tiempo para preparar partidos, en estas semanas es cuando incides en aspectos tácticos y cosas a corregir. El resto lo trabajas siempre en vídeo, es así éste fútbol.
– ¿Están pensando en la Copa?
– Con Imanol no se puede pensar en otra cosa. Cuando nos dicen que jugamos el jueves pones foco en el Jove aunque esté el derbi. Somos pocos para la eliminatoria, pero suficientes como para superar la ronda. Seguro que llevamos un buen equipo, aunque es cierto que en el vestuario hemos hablado de ello...
– Vayamos a sus comienzos. ¿Dónde da sus primeras patadas al balón?
– En el Trajana, iba con mi abuelo, que me recogía en el colegio e íbamos andando al campo. Luego, en prebenjamines, hice las pruebas en el Badalona y me quedé. Solo estuve un año porque luego firmé por el Espanyol.
Noticia relacionada
– Perico y culé…
– Sí, sí. En Badalona no he hecho demasiada vida, porque al colegio iba a Santa Coloma y cuando jugaba lo hacía en Sant Adrià de Besòs, al lado de la ciudad deportiva del Espanyol. Estuve tres años, de los siete a los diez. El Barcelona estaba también interesado, pero me quedé en el Espanyol porque el campo estaba cerca de casa de mi abuelo.
– ¿Y qué dice de La Masía?
– Fui quemando fases y disfrutándolas todas. Desde alevín hasta el Barcelona B. Es una etapa preciosa, desde juveniles ya dormía allí y pasas 24 horas en La Masía. Intentas ser una esponja para adquirir todo lo mejor posible. Estudias, entrenas, te formas como persona… Como pasa aquí en Zubieta, vamos. Es difícil ser un niño pequeño y pertenecer al Barcelona, tienes que estar tranquilo, rodearte bien, ser buena persona para tener los pies en el suelo. Yo creo que es clave para que salgan tantos futbolistas.
– 17 años y cambia de vida, se muda a Dortmund.
– Exacto. Mis padres y mi hermano mayor vinieron conmigo a Alemania. Fue un gran paso para todos y lo disfrutamos bastante. Cuando pasé a Bélgica mi hermano se quedó en Barcelona por trabajo y en Mánchester mi novia terminó de estudiar y se vino a vivir conmigo como ahora. Resido en Añorga, como algunos compañeros. Tenemos una vida tranquila y familiar.
– Y luego es cuando ficha por el Manchester City.
– Son dos años de éxitos a nivel colectivo. Sabes el rol que vas a tener porque ellos jugaban de memoria, pero cuando estás dentro y ves que puedes jugar a ese nivel pero no lo haces se te hace algo difícil. Pero de todo aprendes, crecí en mentalidad. La base del éxito es el entrenamiento de aquellos que no juegan tanto, en la Real también pasa y los que menos participan son fundamentales.
– Se presuponía que iba a encajar rápido en la Real pero quizás no esperábamos que tanto, parece que lleve años en el club...
– Creo que he caído de pie en la Real. Había coincidido con bastantes compañeros en la selección y todo ayuda. Tenía claro que debía dar este paso, lo llevábamos hablando desde hace años y estoy feliz por la oportunidad. Quiero dar al equipo y a la gente lo que se esperaba de mí.
– ¿Se está cumpliendo lo que le vendieron de la Real?
– Me dijeron que Imanol era duro, pero que éramos un equipazo. Estoy comprobando las dos cosas –risas–. Me comunicaron que se estaban haciendo bien las cosas, pero yo ya seguía a la Real desde hace tiempo. Empezamos de manera irregular, pero ya se está viendo la Real que todos queremos.
– ¿Cómo fue el proceso de su fichaje por la Real?
– Viene de lejos. En el Europeo de hace dos años y medio pregunté a Barrenetxea y Pacheco por la Real porque ya había un interés fuerte, pero me incliné por hacer ese segundo año en el City. Ya en los Juegos, antes de la preparación, tenía más claro que fichaba por la Real.
– ¿Quién le llama? Olabe es tozudo, si un fichaje no se da lo vuelve a intentar a los años…
– Pues sí, es Roberto quien me llama y luego es Imanol antes de empezar el verano quien levanta el teléfono. Es importante que el entrenador te quiera, que muestre interés y que, además, te diga de manera tan tajante que me quería aquí. He sentido mucha confianza por parte de todos y eso te lleva a tomar la decisión de manera más sencilla.
– ¿Con su fichaje por la Real también buscaba la estabilidad?
– Puede ser. Tengo 24 años y he pasado por bastantes ciudades. Sabía que venía a un club estable pero que tiene margen de crecimiento. Venía a jugar y buscar minutos, pero sabiendo que podía mirar a futuro y estar tranquilo en ese sentido.
– La afición le tenía por un futbolista de buen pie, pero ha sorprendido su físico.
– Me lo dicen mucho, sí –risas–. La verdad que aguanto bien el ritmo. En los Juegos veníamos de vacaciones y fui de los que más jugué. Intento dedicar mi día a día al fútbol, a descansar, a hacer lo que toca. Cuando toca entrenar, entrenar, estirar, tratamiento, gimnasio, la nutrición… El día que te relajas se nota en el partido, creo que es la clave para mantener la línea. Nunca he tenido lesiones graves a nivel muscular.
– ¿Sienten que merecen un crédito por lo que viene haciendo el equipo?
– Bueno, puede ser, el fútbol es un poco resultadista. Cuando la gente se acostumbra a ganar, luego en los próximos años es normal que te exijan buenos resultados. Entendemos a la afición y las críticas, pero me resulta curioso que nunca hemos recibido pitos pese al mal inicio. E incluso lo entendería si se produjeran después de un partido malo.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.