Nahikari García: «Mi ausencia, si llegara, no sería traumática; el equipo siempre está por encima»

- ¿Cómo está físicamente?

- Después de tanto tiempo parada es difícil estar al cien por cien. Es verdad que sigo sintiendo molestias en el tobillo pero son cosas que supongo que ahora tendremos que ir ajustando. Yo estoy contenta por volver. La que peor lo he pasado he sido yo. Necesitaba vivir esa sensación de volver a competir y sentirme viva dentro del campo, con chispa. Ahora toca ir poco a poco.

- Vamos, que la lesión no está olvidada.

- No. Supongo que dará guerra durante un tiempo. Sé lo que es jugar con dolor y mientras sea soportable o crea que puedo llevarlo adelante, todo irá bien. Pero dejar atrás una lesión lleva su tiempo.

- ¿Impide esto poder ver la mejor versión de Nahikari?

- Bueno, llevo desde los 16 años jugando a fútbol con molestias. Al final es mucho trote, muchos partidos, muchos minutos, y se nota. Está claro que el cien por cien que se vio el domingo de Nahikari no es el mismo que se va a ver las próximas semanas. Iré a mejor. Cogiendo más ritmo y mejores sensaciones y asimilando esa molestia.

- ¿Sufrió más contra el Rayo en ese querer y no poder ganar, o viendo al equipo desde fuera?

- Desde luego que se sufre más desde fuera, por esa impotencia de no poder ayudar, de querer verte y no poder estar. El domingo, aunque se sufrió mucho, nos quedamos con que recuperamos esas sensaciones de lo que es competir, estar intensas y vivas en el campo. Creo que lo pusimos todo para ganar.

- La falta de resultados ha acentuado la teoría de la Nahikari dependencia. No le hace mucha gracia, ¿no?

- Sin duda que no me gusta. Me gustaría que al equipo le fuera bien estando yo, no estando, de cualquier manera. También creo que se ha juntado un cúmulo de cosas que hacen que sea más complicado sacar los partidos. Hemos tenido muchas lesiones. Pero sin duda tenemos una plantilla para cubrir cualquier ausencia. Un equipo es mucho más que una jugadora.

- Pero, ¿asume ese papel de líder?

- Siento la importancia que tengo dentro del equipo. Las compañeras se encargan de transmitírmelo y sin duda que me siento importante. Sé que mi presencia siempre ayuda porque cada una tiene su personalidad y mi carácter puede ayudar a la hora de competir. Por esa parte estoy feliz por sentir el calor por parte del equipo, pero este equipo está muy por encima de lo que yo pueda dar. Mi ausencia, cuando vaya a llegar, no creo que sea traumática. El equipo siempre está por encima y puede sobrevivir a cualquier falta.

- Cuando vaya a llegar mi ausencia... ¿Se va?

- No, no es eso, pero siempre hablamos de que ese momento algún día llegará, conmigo o con cualquier jugadora. Son situaciones que se pueden dar. Veremos cuándo llega, si llega antes o después, iremos viendo esas situaciones. Me refiero a que siempre habrá falta de jugadoras y el equipo se tiene que sobreponer a eso. Ahora mismo nos falta Marta y notamos su ausencia. Cuando faltó Mariasun, lo notamos, por mucho que Adriana nos daba muy buenas cosas. Pero el equipo siempre tiene que estar por encima de todo.

- ¿Nos pasamos con las expectativas al inicio de la temporada?

- Siempre nos hemos sentido un poco al margen de toda la opinión de fuera. Sí que se crearon expectativas muy altas, sobre todo por parte de gente que no seguía tanto al equipo porque igual se quedaba solo con la imagen de ganar la Copa. Éramos conscientes de dónde estábamos, de dónde venimos, y el trabajo que veníamos haciendo. No había que obsesionarse. No por ganar la Copa había que pensar que íbamos a pelear por la Liga. Pero sí hacer las cosas bien. Somos un equipo que quiere crecer y somos las primeras a las que nos gustaría vernos más arriba en la tabla, haber fallado menos y estar mejor.

- ¿Está haciendo autocrítica?

- Somos ambiciosas y somos las primeras a las que esta primera vuelta de la liga nos deja un sabor agridulce. Es un querer y no poder. Querer estar un poco más arriba y ver que no lo hemos conseguido. Pero seguimos trabajando y nuestra ambición está intacta. Queremos recuperar las buenas sensaciones. El fin de semana dimos un primer paso para que fuera así, esperamos terminar bien el año y a ver cómo va el próximo.

- ¿Siguen sosteniendo que hay mejor equipo que el año pasado?

- Sí, sobre todo en cuanto a la base. Venimos de un trabajo muy bueno y el equipo está más asentado. Ganar la Copa también te da un plus de poso, de saber qué es competir ese tipo de partidos. La pena es que en este inicio de liga no se ha podido ver. Pero nos han lastrado mucho las ausencias. No hemos estado todo el equipo disponible en ninguna convocatoria.

- La Copa da un plus, dice, pero, ¿no se ha convertido también en una losa?

- Sí. Ahora casi todo es hablar de la Copa. Nos han dado muchos premios por aquello. Fue maravilloso pero estamos en otra temporada. Ya pasó y el fútbol siempre es hoy. Lo que pasó el domingo ya está olvidado, hay otro partido el sábado. Sí que añade un plus de presión el que todo el mundo te recuerda aquello pero tenemos que centrar nuestra cabeza en el hoy, en seguir haciéndolo bien.

- Ahora el Tambor de Oro. ¿No están anestesiadas de tanto premio?

- No. Es una pasada poder recibir ese tipo de premios. Somos conscientes de que son reconocimientos importantes. Y no hay una diferencia entre masculino o femenino sino que se nos valora como deporte, como un logro importante que se consiguió. Que nuestro nombre esté ahí, elevado sobre el resto, nos hace darle más valor a todo lo conseguido, cosa que igual en el momento no te das cuenta. Lo que se hizo fue algo muy complicado.

- Miremos al futuro. ¿A qué aspira esta Real?

- A seguir creciendo. A tener mejores sensaciones. A superar temporadas anteriores. Sobre todo debemos conseguir mayor regularidad, que es lo que nos ha faltado en otras temporadas. El año pasado la segunda vuelta fue muy buena pero en la primera fallamos mucho. Lo mismo nos está pasando ahora. Nos falta esa continuidad. Cuando competimos estamos muy bien, pero nos cuesta competir cada fin de semana para ganar. Está comprobado. El Atlético de Madrid perdió contra el Barça la pasada campaña pero no perdió más. El Barça perdió la liga por no ser tan regular.

- ¿Están muy lejos esos equipos?

- Llevan muchos años de trabajo y muchos años de apuesta, de inversiones y de hacer las cosas muy bien, trabajando una base y apostando fuerte. En ese sentido, parten con ventaja. Lo que hay que buscar es igualarse a eso. Ya no solo la Real, sino que el resto de clubes den ese salto para que las distancias cada vez sean menores. Que se crea, que se invierta y que se empuje.

- Se quedó para que el equipo creciera y se pudiera aspirar a objetivos altos. ¿Se ha arrepentido en algún momento?

- No, arrepentirme no. Cuando las decisiones se toman desde el corazón, no hay que arrepentirse, pero sí que es verdad que igual esperas que las cosas sean de diferente manera. Todo lo que se habló desde la emoción de la Copa del año pasado, las expectativas altas... todos quieren empujar pero ahora ves las complicaciones y que las cosas no salen como quieres, y te da un punto de rabia. Además, se junta la lesión que he tenido. No ha sido mi mejor inicio de temporada desde que estoy en la Real.

- ¿Sus aspiraciones personales pasan por ganar títulos?

- Después de haber ganado un título, tras perder otros antes que crean ansiedad, no es lo que más me preocupa. Me preocupa más mi crecimiento personal, sentir que estoy aprendiendo, que me voy sintiendo realizada, que me llena lo que hago. Claro que tengo mis aspiraciones. Me encantaría, por ejemplo, jugar la Champions. Son cosas que me gustaría ir consiguiendo, pero sobre todo busco sentirme llena y realizada.

- ¿Puede entrar la Champions entre las aspiraciones de la Real?

- Tenemos que crecer mucho todavía. Hay mucho trabajo por hacer. Por infraestructura y por convicción es un club que puede conseguirlo, porque tenemos muy buenos medios. Siempre sale gente buena. En Gipuzkoa hay buena base. Gente como Mariasun, Nerea, Leire Baños está saliendo de la cantera y jugando en la selección. Pero hay que seguir apostando. Todavía nos falta. El club tiene que seguir queriendo empujar.

- ¿Y la afición? ¿Empuja?

- Sí que es verdad que al principio de liga, los primeros partidos se notó mucho. El Z7 estaba lleno. Para el Atlético tuvimos que bajar al Z1 y sí que ese día quizás esperábamos algo más de gente. Pero este último fin de semana contra el Rayo les hemos sentido muy cerca. Creo que hubo una conexión muy buena que nos ayudó en el arreón de la segunda parte de ir a por el partido. Aunque parezca un tópico, es verdad: la afición te empuja, te motiva, te hace sentirte viva dentro del partido y nosotras lo necesitamos.

- ¿Es partidaria de jugar más a menudo en el Real Arena?

- El año pasado me quedé con una cosa y es que cuando jugamos contra el Athletic (2-2) sí sentimos que a partir de ahí la gente se enganchó más al equipo. Pienso que es positivo que podamos estar más regularmente allí. No sé cuántos partidos, pero sí atraer a esa gente que no viene tan a menudo a Zubieta, a base de competir bien, hacer buenos partidos, vistosos, y poder enganchar a la gente para que llegue un momento en que Zubieta esté tan lleno que sí o sí nos tengan que llevar al Reale Arena. Pero lo primero que queremos es llenar Zubieta.