Una broma demasiado pesada

La

El aficionado que más horas mete en Zubieta viendo las categorías inferiores y con décadas de socio a sus espaldas me mandó el siguiente mensaje al acabar el partido: «Sumar diez puntos lo antes posible y asegurar la permanencia. No aspiro a más». Una persona que siempre transmite optimismo y que no se deja llevar por los estados de ánimo. Entonces me di cuenta de que esto

Cinco minutos bastaron para que se nos haya caído la venda de los ojos. Podría tratar de animarles y subrayar la segunda parte que firmó l

Hay fantasmas que persiguen históricamente a muchos equipos y a los que es complicado vencer. Cuando lo haces es cuando te conviertes en un equipo grande. El Atlético fue siempre 'El Pupas' hasta que llegó Simeone hace diez años para cambiar el destino del club. Perdió dos Champions de la manera más cruel, pero hoy no se puede decir que sea un equipo perdedor. Lo mismo pasaba con el Barcelona hasta que apareció Cruyff en los noventa para quitarle el complejo de inferioridad que tenía con el Real Madrid y ponerle a la misma altura.

Habitualmente cometemos el error de creer que jugar bien es tener calidad técnica para superar al adversario mediante el fútbol combinativo. Pero eso representa solo una pequeñísima parte de lo que es este juego.

Consideramos que tuvo esa buena racha de dos meses porque estaba Silva en el campo y está claro que es un futbolista que condiciona el estilo. Pero ayer se ganaba 2-0 en el minuto 85.

Es cierto que en ese tiempo ha habido partidos fiables, como el de San Mamés, contra el Barcelona en la Supercopa y el de Córdoba, por mucho que fuera un rival de inferior categoría. Pero

Me da que la falta de competitividad es un mal endémico que persigue a este club, porque no me negarán que esta historia la hemos vivido más veces. Y con jugadores de todas las épocas. Porque

Y es que es difícil de asumir los dos goles que encajó la Real. El primero, el que abrió la caja de los truenos, tras un córner a favor al que solo le faltó subir a rematar a Remiro.

A partir de ahí, con el miedo en el cuerpo y jugadores de peso ya sustituidos como Merino y Oyarzabal,

Pero no, la jugada del empate fue más sangrante aún.

El desenlace del partido convirtió en anécdota los 85 minutos anteriores en los que la Real tomó el pulso a su rival en la primera parte, llevando la iniciativa y teniendo una buena ocasión para marcar por medio de Guridi, y se soltó la melena en la segunda con los goles de

Pero lo relevante es que no somos nada competitivos. Si empatas un día que debías haber goleado, estás apañado. Eso no significa que se esté haciendo todo mal, más bien es al contrario, pero nos da hasta donde nos da. Porque así

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