Aihen se estrena a lo grande y se lo pone crudo a Theo

Aihen cumplió con nota en su primer partido oficial con el primer equipo. Jugó 83 minutos a un alto nivel hasta que fue sustituido por Zubeldia, curiosamente el jugador en el que más confianza tenía Garitano. Mostró carácter y aplomo en un escenario nada fácil ante jugadores arrogantes como Lucas Vázquez y Carvajal que, ante las dificultades que tuvieron para superarle, trataron de buscarle las cosquillas con ese otro juego que tan bien se les da cuando las cámaras no les enfocan. Ahí también estuvo listo.

Tuvo la disciplina en defensa que no tiene Theo y seleccionó bien las contadas ocasiones en las que se prodigó en ataque. No tiene la potencia de Theo ni su zancada, pero lo compensa con otras virtudes. Entrega el balón con sentido y sus errores los comete en zonas en las que hay posibilidad de enmendarlos. Hay lateral. Uno más que sale de Zubieta y uno más que ha sido retrasado de posiciones adelantadas a la línea defensiva.

Aihen ocupó ese puesto en el lateral izquierdo en ausencia de Theo, por la cláusula del miedo, y de Kevin, lesionado. A su derecha tuvo a Héctor y por delante contó con Oyarzabal, el jugador de mediocampo para adelante que más sentido colectivo tiene la Real Sociedad. En más de una ocasión recibió la ayuda del 'diez' de la Real cuando Carvajal ganó metros para intentar superarle.

En ese escenario, Aihen consiguió lo primero que debe hacer un jugador: ganar el duelo particular a su par, en este caso a Lucas Vázquez. Acabó por sacarle del partido, desquiciado, con doble amarilla en el minuto 63, así que mejor, imposible. La insólita imagen de ver a Lucas Vázquez pagando su enfado con el cuello de su camiseta que remendó de un tirón seco en ambas manos fue el reflejo de su partido.

El realista logró tener a Lucas Vázquez lejos de la zona en la que es peligroso. Le siguió hasta el baño. Por ahí empezó a ganarle la partida. Solo le recuerdo una acción individual por la banda derecha en la primera media hora en la que el extremo blanco logró pisar la línea de fondo para sacar un centro blando al segundo palo sin peligro ninguno y en la segunda parte ni apareció. El rendimiento de Aihen fue creciente y el de Lucas Vázquez decreciente.

Aihen estuvo atento para tapar las acciones del Madrid que llegaron por su banda y para ayudar en las que llegaron por la contraria. En el minuto 15 estuvo listo para sacar un balón sin dueño en el área pequeña que había salido rebotado de un mano a mano entre Vinicius y Rulli.

En ataque seleccionó bien las acciones en las que pisó campo contrario con el balón en el pie. Cerca de la media hora, después de errar en dos pases rebasada la línea divisoria, consiguió combinar por fin con Oyarzabal y Willian José para llegar cerca de Courtois. Sus compañeros creyeron en él y él respondió.

Uno de los pocos errores que cometió llegó en la segunda parte segundos después de que un disparo de Januzaj desde fuera del área se fuera rozando el poste. Aihen pecó al darle a Carvajal más distancia de la debida y no cerró un centro de éste al corazón del área que remató de cabeza Benzema. El balón salió manso a las manos de Rulli.

Para él se guardará la acción en la que le rebañó la pelota al balón de oro Modric -todavía le está buscando- y su participación en la sobresaliente jugada colectiva en la que la Real Sociedad llevó el balón desde Rulli hasta el área pequeña del Real Madrid y que Januzaj no supo rematar.