PSE-EE y Podemos, vidas separadas
Ambas formaciones de izquierda llevan caminos diferentes en Euskadi. Los partidos que lideran Mendia y Martínez mantienen una relación correcta, pero han optado por estrategias políticas diferentes
. Tras pasar por altibajos y disputas, las relaciones entre PSOE y Unidas Podemos están a día de hoy rotas en Madrid, y en La ... Rioja a punto de fracturarse. En Euskadi, sin embargo, la situación es diferente: llevan caminos separados. Los vínculos entre ambas formaciones son correctos, aunque cada una ha optado por seguir su propia estrategia política. La colaboración entre los partidos de izquierda no acaba de cuajar en el País Vasco, donde los socialistas gobiernan en coalición con el PNV en todas las instituciones, y el partido morado ha pactado, sobre todo en asuntos de política social, con EH Bildu. Por esta misma razón, desde ambas organizaciones reconocen que no ha habido posibilidad de ir de la mano. No obstante, también defienden que la rivalidad política no está reñida con la buena relación. De hecho, admiten que las «relaciones personales son respetuosas».
Pilar Garrido, diputada por Gipuzkoa y persona de la máxima confianza de Pablo Iglesias, aseguró ayer a este periódico que «el Partido Socialista en Euskadi ha elegido una línea que a nosotros no nos convence. Yo diría que tenemos a un PSE-EE con cierta subalternidad con respecto al PNV. Y esto significa que es un partido relativamente invisible. Sus políticas no se ven porque quedan camufladas bajo el aura de los nacionalistas».
Y es que en más de una ocasión, Elkarrekin Podemos ha apelado a la formación que lidera Idoia Mendia, aunque sin éxito, a dar un cambio de rumbo y a mirar a las fuerzas progresistas vascas para construir una alternativa de izquierda. Para la también secretaria de Políticas Sociales de Unidas Podemos, el PSE-EE se encuentra «muy cómodo bajo el ala de los jeltzales».
Los socialistas gobiernan en coalición con el PNV y los morados pactan de forma puntual con Bildu
En cualquier caso, la relación respetuosa entre ambas formaciones quedó aparcada durante las elecciones municipales del 26 de mayo. El cruce de críticas y acusaciones fue la tónica general de la campaña. Podemos Euskadi apostó entonces por gobiernos con PSE-EE y EH Bildu en Ayuntamientos y Juntas Generales. Su secretario general, Lander Martínez, mostró su propósito de formar gobiernos con las dos fuerzas «que se denominan progresistas, que son PSE-EE y EH Bildu». Instó a los socialistas a «decidir» qué tipo de alianzas preferían y les emplazó a definir «si querían seguir en un Gobierno en el que estaban invisibilizados y se tragaban las políticas neoliberales del PNV, o si decidían conformar alianzas con quienes están comprometidos con políticas progresistas».
Los socialistas no se quedaron atrás, y en la misma línea arremetieron contra los morados. La secretaria general del PSE-EE, Idoia Mendia, pidió a Elkarrekin Podemos que no tratara de «distraer» a los electores con «señuelos» sobre pactos de izquierdas, ya que lo que le interesaba, en realidad, era «pactar con el independentismo de EH Bildu».
En toco caso, fuentes socialistas, también reconocieron que no ha sido posible ir de la mano con Podemos, formación con la que sí han pactado en más de una ocasión en aspectos sociales. En el PSE-EE existen resentimientos por las críticas que los morados les han lanzado debido a su coalición con los jeltzales y por frases como «el rodillo del Gobierno PNV-PSE-EE, manifestadas en «tono despectivo».
Acuerdos en Ayuntamientos
Si PNV y PSE-EE mantienen un pacto global de Gobierno en Euskadi, Podemos ha acordado en algunas ocasiones con EH Bildu. De hecho, la coalición soberanista se hizo el pasado mes de junio con las Alcaldías de Errenteria y Ordizia gracias al apoyo de la formación morada. En el primero, EH Bildu, con sus nueve escaños y Elkarrekin Podemos, con tres, sellaron un acuerdo que permitió a la candidata soberanista, Aizpea Otaegi, hacerse con la vara de mando. En Ordizia, Adur Ezenarro, se convirtió en alcalde al lograr el respaldo de su grupo, con siete escaños, y los dos de Elkarrekin Podemos, que sumaron mayoría absoluta.
En el caso del Ayuntamiento de Irun, sin embargo, las relaciones entre ambas formaciones se han suavizado tras de la celebración de la última cita electoral.
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