Ortuzar señala que «todo está abierto» para la elección de candidato del PNV a lehendakari

Ortuzar recordó que su partido «es un poco distinto en la toma de decisiones. El procedimiento está muy tasado y primero el presidente de la ejecutiva, así como los de los consejos territoriales, tienen que hablar con el lehendakari. Ahí se diagnosticará la situación. Luego se tomarán las decisiones». Ortuzar añadió que es «cuestión de semanas que esta conversación se lleve a cabo. Por tanto, está todo abierto».

El presidente del EBB prefiere desplazar el foco hacia el trabajo pendiente de desarrollar en los meses que quedan de legislatura. «Hay excesiva ansiedad respecto a la apertura de un calendario electoral que todavía no está fijado. Tenemos por delante leyes muy importantes por aprobar como las de Educación, Empleo o Cambio Climático. Son cuestiones –resaltó Ortuzar– que están ya en el Parlamento Vasco y que hay que sacar adelante. Estamos concentrados en esta labor».

La decisión sobre si Urkullu se presentará a la reelección ha adquirido protagonismo debido a que, una vez realizada la investidura de Pedro Sánchez y evitada la repetición electoral, todo apunta a que las autonómicas tendrán lugar en marzo para no coincidir con las europeas de junio. Por tanto, la maquinaria jeltzale debe moverse con celeridad porque después de las navidades Euskadi se instalará en la precampaña.

Las quinielas están abiertas, pero lo más probable es que Urkullu vuelva a ser el cabeza de lista al tratarse de un valor seguro, un elemento positivo en tiempos de zozobra económica y social. De hecho en el Sociómetro de febrero fue el político más valorado (5,7). Sin embargo, tal y como desveló ayer este periódico, en algunos cuadros del PNV de Bizkaia existe la opinión de que es necesario un relevo y se apunta que la persona indicada sería la eurodiputada Izaskun Bilbao.

El cambio vendría propiciado al percibirse cierto desgaste en la gestión. A resultas del Covid, los problemas que ya habían aparecido en Osakidetza, como las listas de espera, se han incrementado generando un enorme descontento entre los profesionales del sector y los ciudadanos. A este problema habría que añadir otros, como los surgidos en la Ertzaintza o en la Ley de Educación.

Este desgaste habría incidido en que los resultados de las últimas convocatorias electorales hayan provocado un descenso de los apoyos cosechados por el PNV mientras que su principal competidor, EH Bildu, ha registrado un incremento. Los jeltzales se enfrentan a las autonómicas con el precedente de las generales del 23-J, que fueron ganadas en Euskadi por el PSE, situándose en segundo lugar EH Bildu y en tercero el PNV. En Gipuzkoa también fue desplazado del primer puesto, en este caso por EH Bildu. Los resultados de las forales y municipales de mayo también reflejaron una bajada de los jeltzales que, si bien fue el primer partido de Euskadi, en Gipuzkoa fue ampliamente superado por EH Bildu.

El PNV no oculta que la situación es delicada. El propio Ortuzar reconoció en el último Alderdi Eguna que el escenario es «complejo». De ahí que arengara a los afiliados con llamadas de advertencia para que reaccionen ante el empuje de la izquierda abertzale. «Es el momento de salir del confort de nuestros batzokis, de abrirlos de par en par a las nuevas realidades», resaltó.

El choque de las dos formaciones nacionalistas será intenso de cara a las autonómicas. EH Bildu tampoco ha desvelado quién será su candidato a lehendakari, una situación que no favorece que el PNV muestra sus cartas. Arnaldo Otegi, que como líder de la formación podría ser el cabeza de lista, ha dejado abierta la posibilidad de no competir por la lehendakaritza.