El Gobierno Vasco aprueba hoy el proyecto para paliar la prórroga sin tener atado ningún apoyo
El PP se distancia de Urkullu al rechazar que la RGI suba más que el sueldo de los funcionarios | El Ejecutivo de PNV y PSE confía en que los grupos de la oposición al menos se abstengan para facilitar la ley de acompañamiento y permitir las subidas
El Gobierno Vasco aprobará hoy el proyecto de ley de acompañamiento de la prórroga presupuestaria sin tener garantizados los apoyos necesarios para que salga adelante en el Parlamento Vasco. El PP, que se había perfilado en las últimas semanas como el socio más probable, marcó ayer distancias con el proyecto de ley del Ejecutivo de coalición de PNV y PSE después de que su portavoz, Josu Erkoreka, avanzara que la subida de la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) será «algo mayor» que el incremento previsto para el sueldo de los funcionarios, que en un principio se situará en el 2,25%. El mismo porcentaje que se recoge para los trabajadores de la educación concertada. En los próximos días se comprobará si el órdago lanzado ayer por el presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, pone en riesgo el proyecto de ley en su conjunto o es solo un toque de atención al gabinete de Iñigo Urkullu, que no se plantea retirar el proyecto a pesar de no tener garantizada una mayoría en la Cámara.
El anuncio del Gobierno Vasco de que el incremento de la RGI será «algo mayor» que la subida del 2,25% prevista para el salario de los funcionarios hizo tambalearse ayer un acuerdo entre el Ejecutivo y el PP que todo el mundo daba por encarrilado, incluidos los otros dos grupos de la oposición: EH Bildu y Elkarrekin Podemos. Pero el líder popular, Alfonso Alonso, ofreció ayer una rueda de prensa con venezolanos que viven en Euskadi y aprovechó la ocasión para marcar perfil y saborear la influencia que su grupo ha recuperado en el Parlamento tras el fracaso de la negociación presupuestaria.
Alonso advirtió de que aún no existe ningún acuerdo sobre el proyecto de ley y añadió que existen «discrepancias» que, ahora mismo, imposibilitan un pacto. La principal es que el PP no ve «razonable» incrementar la RGI por encima del 2,25% previsto para la subida salarial de los funcionarios, por lo que anunció que no apoyará el proyecto de ley si el Ejecutivo no reconsidera esa medida. «El Gobierno Vasco pretende que los que cobran ayudas sociales sean los que más incrementen sus percepciones, por encima de los funcionarios, los profesores y cualquier otro colectivo», criticó Alonso, que avisó a Urkullu de que «no puede pretender apoyar las políticas que defiende EH Bildu con el voto del PP». El líder popular advirtió al Gobierno Vasco que «tiene que elegir» y añadió que «no puede pretender que nosotros apoyemos cualquier cosa, porque no lo vamos a hacer».
Lectura única
El Ejecutivo vasco, por su parte, restó importancia al hecho de que el proyecto de ley vaya a ser aprobado sin tener garantizada una mayoría en el Parlamento, ya que es lo habitual en todo proyecto de ley que aprueba el Consejo de Gobierno. Aunque en este caso esa falta de apoyos puede ser un problema porque la intención del gabinete de Urkullu es que la ley de acompañamiento pueda ser sancionada por el Parlamento a mediados de febrero, por lo que los márgenes para negociar son mínimos. El proyecto se tramitará por el procedimiento de lectura única, por lo que se votará en bloque en el Parlamento.
Erkoreka aseguró ayer en una entrevista en Radio Euskadi que la negociación del proyecto de ley sigue abierta, por lo que no descartó que ningún grupo de la oposición pueda aprobarlo. El portavoz del Gobierno Vasco reconoció que EH Bildu y Elkarrekin Podemos han mostrado «reticencias» para votar a favor -la entrevista fue anterior a la rueda de prensa del PP-, pero rompió una lanza a favor de la posibilidad de la abstención. Su tesis es que ningún grupo de la oposición querrá aparecer como el que «se opone frontalmente» a que los funcionarios, los trabajadores de la enseñanza concertada o los perceptores de la RGI dejen de mejorar su situación económica, por lo que abrió la puerta a abstenciones críticas que permitirían que el proyecto saliera adelante. PNV y PSE están a un parlamentario de la mayoría absoluta, así que les vale con la abstención de uno de los grupos para aprobarlo.
Erkoreka defendió la tramitación de la ley de acompañamiento presupuestario como un único cuerpo normativo, una iniciativa que ha sido criticada por la oposición, y afirmó que, por «economía normativa», no tendría sentido tramitar tres proyectos normativos diferentes. El portavoz del Gobierno Vasco argumentó que «hay un principio en derecho y política de economía normativa que aconseja no hacer 3 o 25 leyes cuando es posible incorporar las previsiones en un solo proyecto normativo». Aseguró que, en este caso, «no son medidas heterogéneas, sino que hablamos de tres medidas con un denominador común: realizar incrementos en relación con prestaciones públicas de determinados colectivos para actualizar su situación económica».
A juicio de Erkoreka, se trata de tres medidas «muy coherentes» que responden a un «propósito compartido», por lo que no tendría sentido tramitar tres proyectos cuando se trata de «cuestiones con una conexión inequívoca». Todos los incrementos previstos rondarán el 2,25%, aunque el de la RGI será ligeramente superior.
«Son medidas positivas»
El lehendakari, Iñigo Urkullu, se refirió ayer brevemente al proyecto de ley de acompañamiento de la prórroga y confío en contar con el «apoyo suficiente» para aprobar unas «medidas positivas» para los funcionarios y los profesionales de la educación, así como para «ayudar a quienes más lo necesitan» a través de la RGI. En el acto de presentación del parque de energía solar fotovoltaica Ekian, Urkullu señaló que «esperamos contar con el apoyo suficiente para poner en marcha unas medidas positivas para diversos colectivos».