Ver fotos
El legado de Ordóñez regresa a la Parte Vieja
Una placa en memoria del edil popular le recordará para siempre junto al bar donde ETA le mató. La viuda y la hermana del político donostiarra califican el emotivo homenaje como «una de las cosas más gratificantes que hemos tenido»
A. GONZÁLEZ EGAÑA
SAN SEBASTIÁN
Sábado, 25 de enero 2020
Un silencio conmovedor inundó este sábado al mediodía la calle 31 de Agosto de San Sebastián, protegida por el calor de varios cientos ... de ciudadanos que quisieron recorrer los mismos pasos que dio Gregorio Ordóñez el 23 de enero de hace 25 años, minutos antes que ETA le asesinara de un tiro en la nuca en el restaurante La Cepa. A las calles de la Parte Vieja regresó, para siempre, su legado y su espíritu en forma de placa conmemorativa. Lo hizo de la mano de su familia, de sus amigos, de la corporación municipal encabezada por su alcalde, el jeltzale Eneko Goia, con la excepción de EH Bildu por deseo de la familia, y de las numerosas personas que se sumaron al homenaje a quien fue teniente de alcalde del PP y presidente del partido en Gipuzkoa. En el pequeño memorial, colocado en el suelo, junto a La Cepa, se puede leer la inscripción «Gregorio Ordóñez Fenollar. Víctima de ETAren biktima» junto a la fecha del asesinato. Se trata de una réplica del memorial que se colocó por primera vez en marzo de 2018 en recuerdo de Juan María Araluce, el entonces presidente de la Diputación de Gipuzkoa, su chófer y tres escoltas.
El abrazo emocionado de dos mujeres marcadas por el asesinato de su querido Goyo, su viuda, Ana Iríbar, y su hermana Consuelo, que no pudieron contener las lágrimas, fue el momento con mayor carga emocional del acto. Ese instante estuvo acompañado por las notas de la banda municipal de txistularis que interpretaba la bella melodía 'Itsasoa laino dago', de Urko. También se pudieron escuchar los acordes de 'Adiós ene maitia' y del 'Agur Jaunak'. «Es de las cosas más emocionantes que hemos tenido en estos tiempos y gratificantes también», agradecieron Ana Iríbar y Consuelo Ordóñez tras colocar sendos ramos de flores sobre la placa de Gregorio, gesto que repitieron, a continuación, con una rosa blanca los miembros de la corporación, así como cargos del PP, del PNV, del PSE-EE y de Podemos que también se quisieron sumar a la ofrenda. La viuda de Ordóñez agradeció a los presentes su asistencia y quiso resaltar «que sepa todo el mundo que aquí, en el corazón de San Sebastián, en la Parte Vieja donde Gregorio fue asesinado, todavía se le recuerda y se le echa mucho de menos».
Ambas coincidieron en destacar que «aunque ETA quiso arrebatárnoslo nunca podrá borrarnos su espíritu que es lo que ha impregnado este acto tan bonito». Iríbar confesó que le «es imposible trasladar toda la emoción que Consuelo y yo hemos vivido, toda la emoción que nos han transmitido las personas que nos están acompañando y la corporación del Ayuntamiento de Donostia» durante la comitiva ciudadana que había arrancado desde Ijentea, para recorrer las calles Mayor y 31 de Agosto hasta llegar a La Cepa. «Este recuerdo para Gregorio es inolvidable y quiere decir que la gente todavía le lleva en su corazón», agradeció Iríbar.
Ni Ana ni Consuelo se olvidaron del resto de víctimas del terrorismo etarra. En sus palabras, la viuda de Ordóñez remarcó que poner, «aunque sea 25 años después, una placa aquí por Gregorio Ordóñez, es ponérsela a todas y cada una de las más de 850 víctimas asesinadas por ETA».
«Inundar la ciudad de placas»
Una Consuelo Ordóñez, más emocionada que nunca en público, se sumó también al agradecimiento y se refirió a la memoria de su hermano y del resto de asesinados por ETA para remarcar que «nos arrebataron sus vida, nos los arrebataron físicamente, pero jamás podrán borrarlos de nuestras memorias y siempre, siempre, lucharemos por mantener vivo el recuerdo de todas y cada una de las víctimas». Invitó a otras familias de asesinados por ETA a que también apoyen la colocación de placas en recuerdo de sus familiares. «Tenemos que inundar esta ciudad de placas de víctimas en el lugar donde fueron asesinadas», remarcó. La también presidenta de Covite señaló que gestos como el de este sábado es necesario que se extiendan para ganar «la batalla del relato». La hermana de Gregorio Ordóñez resumió que, con el «emocionante» acto se podía constatar que «la memoria y el legado de Gregorio, siguen muy vivos 25 años después».
Noticia Relacionada
«El objetivo de la deslegitimación del terror se ha abandonado por completo»
Antes del recorrido a pie, familiares y amigos de Ordóñez fueron recibidos en el Ayuntamiento, donde el alcalde les hizo entrega de una réplica de la placa. A la salida arrancaron la comitiva desde la calle Mayor hasta enfilar 31 de Agosto arropados entre otros por el presidente del PP vasco, Alfonso Alonso; el delegado del Gobierno en Euskadi, Jesús Loza; el presidente de las Juntas Generales de Gipuzkoa, Xabier Ezeizabarrena, la diputada foral del PSE Rafaela Romero o el asesor del Gobierno Vasco para las políticas sobre víctimas, Enrique Ullibarriarana. El director del Memorial de Víctimas de Vitoria, Florencio Domínguez, el filósofo Fernando Savater, el antropólogo Mikel Azurmendi y víctimas del terrorismo como Barbara Dührkop, Cristina Cuesta, Marta Buesa o Rubén Múgica también asistieron al homenaje.
Las numerosas personas que se sumaron al acto de la placa y al recorrido por la Parte Vieja dedicaron un largo aplauso a la familia Ordóñez al finalizar el acto. Todo el mundo quería saludar y dedicarles una palabras y muchos de ellos inmortalizaron con sus teléfonos móviles la placa conmemorativa vestida de rosas blancas.
Goia remarca que «hacía falta que Donostia tuviera esta catarsis como ciudad»
El alcalde de Donostia tampoco pudo escapar a la emoción del ciudado homenaje que inundó la Parte Vieja de la ciudad. Eneko Goia, que encabezó con la familia la comitiva ciudadana organizada por la Fundación Gregorio Ordóñez, confesó que todo el acto en sí había sido un momento «particularmente muy emotivo». Recordó que toda la semana, desde la inauguración de la exposición 'Gregorio Ordóñez. La vida posible' en el Palacio Miramar, había traído a la memoria lo que sucedió el 23 de enero de 1995 en la ciudad «cuando fue asesinado uno de sus representantes», el carismático teniente de alcalde del PP.
«Estos 25 años también sirven para actualizar aquello, para traerlo al día de hoy y, en cierto modo, quitarnos una espina», apuntó, En palabras de Goia, «hacia falta que tuviéramos esta catarsis como ciudad». «Este es el camino y por él tenemos que seguir caminando», aseguró, en referencia a las siguientes placas en recuerdo de los asesinados en San Sebastián que se seguirán poniendo en las calles de la ciudad.
El propio alcalde Goia ha sido quien ha llevado la iniciativa en este proyecto de memoria, consensuado con todos los grupos municipales en el seno de la Comisión de Derechos Humanos del Ayuntamiento y compartido con las familias afectadas. A partir de febrero, de hecho, se seguirá con «una dinámica más normalizada» para la colocación de más placas como se había acordado en la citada comisión y en conversación privada con las familias que van expresando su deseo de que se coloque la que recordará a su allegado.
Para culminar con la colocación de la placa se sigue un proceso muy ciudado, ya que «hay momentos en los que algunas familias, que sí están por la labor, quizás no se sienten con fuerzas como para afrontar la carga emocional que supone un acto de esas características y se decide esperar un tiempo», apuntó Goia. De cara a los próximos meses, se han hecho muchos contactos con otras familias de víctimas. El alcalde explicó que el consistorio donostiarra está en conversaciones con varias de ellas y que en próximas fechas «se irán dando más pasos».
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión