Consensos ante la crisis

En tan convulsa coyuntura, en la que aparecen encuestas en la que cada vez más gente no ve descabellada la posibilidad de una futura tercera guerra mundial, parece imposible que instituciones y gobernantes ofrezcan certezas a la ciudadanía, pero al menos sí deberían enviar un mensaje de unidad y responsabilidad, con una ultraderecha dispuesta a seguir pescando en río revuelto.

Algunos brotes verdes se atisban en Madrid, sobre todo si se confirmara el inicio de una unidad de acción entre PSOE y PP para responder al disparatado órdago del nuevo presidente de Estados Unidos. Si una cuestión tan grave como esta, que afecta al futuro de las empresas y la economía, no es motivo suficiente para pactos de Estado, apaga y vámonos.

En Euskadi, también soplan vientos de acuerdo en cuestiones que han dividido a la sociedad vasca como el futuro nuevo estatus. En este sentido, el acercamiento, todavía por cristalizar, entre el PNV, la EH Bildu que se cita con Adegi y Petronor, y el PSE para intentar ensanchar el consenso sobre el futuro autogobierno y el reconocimiento de la identidad nacional vasca en términos integradores, también constituye una buena noticia. Ya solo faltaría que entre Otegi y Zapatero persuadieran a Puigdemont de que no es tiempo de extravagancias. Más difícil parece pensar que fueran capaces de convencer a Podemos y Sumar de que no se hagan el 'harakiri'.