Vuelven las chinchetas contras los ciclistas en la carretera de Goizueta: «Hay decenas y hace dos días no había ninguna»
En la mañana de este viernes se han podido contar por puñados las chinchetas recogidas en apenas 400 metros que tienen el objetivo de dañar a los cicloturistas
Las chinchetas en la carretera que une Hernani y Goizueta con el objetivo de que los ciclistas que transitan la GI-3410 y la NA-4150 pinchen la rueda han reaparecido esta semana, y lo han hecho a decenas en un tramo de escasos 400 metros.
No es la primera ocasión en la que alguien lanza las chinchetas en una carretera muy transitada por los cicloturistas, al ser una vía de escaso tráfico a partir de Ereñotzu y disfrutada por su entorno natural a través de la calzada que acompaña el curso del río Urumea. Un escenario idílico para el deporte y la tranquilidad que se puede truncar de un momento a otro si uno tiene la mala fortuna de pisar una de las decenas de chinchetas que este viernes por la mañana se encontraban en el arcén derecho de cada sentido en un tramo concreto de apenas 400 metros.
Son objetos peligrosos no solo por el hecho de provocar un pinchazo, sino por las consecuencias que eso puede tener en la bicicleta si la cámara de la rueda revienta sin previo aviso mientras el cicloturista rueda a una velocidad y que le puede llegar a provocar una caída.
Este periódico ha sido testigo de la recogida que varios cicloturistas han efectuado esta mañana en el punto kilométrico 28 de la NA-4150, que se encuentra, en dirección Leitza, nada más cruzar la muga entre Gipuzkoa y Navarra, de un centenar de chinchetas. Se encontraban en los arcenes de cada sentido de la carretera y su ubicación era especialmente peligrosa para los que se adentran en Navarra, al encontrarse en un descenso donde las velocidades de las bicicletas superan fácilmente los 30 km/h.
Un cicloturista que rodaba hacia Goizueta se sorprendía de la cantidad de chinchetas. «Hostia, ¿aquí hay más? Esas tienen que ser recientes porque pasé hace un par de días y no estaban».
La situación no es nueva pero hacía tiempo que no ocurría. En octubre de 2023, alrededor de doscientos cincuenta cicloturistas ya alzaron la voz para denunciar la cantidad de chinchetas que se encontraban en la ruta entre Hernani y Goizueta. Denunciaron entonces la actitud de ciertas personas que sabotean esta carretera tan empleada por los aficionados al ciclismo y recordaban que «las carreteras son de uso público y lo sensato es compartirlas entre los distintos tipos de vehículos con respeto».
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