«Nos da igual el tiempo, venimos a disfrutar»

Es el caso de Gisela y Leonardo, que pasados escasos minutos del mediodía paseaban junto al Aquarium de San Sebastián mientras inmortalizaban el momento con su teléfono móvil y la magestuosa bahía donostiarra de fondo. «Queríamos conocer esta parte de España porque no la conocíamos. Nos habían hablado muy bien de la ciudad y no está pareciendo muy linda», aseguraba esta pareja de argentinos asentados desde hace muchos años en Madrid nada más poner pie en la capital guipuzcoana. «Recién acabamos de llegar hace diez minutos», reconocía él mientras consultaba el mapa de la ciudad en el smartphone.

El plan de Semana Santa para la pareja es recorrer a pie este jueves la mayoría de los rincones de San Sebastián y hacer pequeñas excursiones de día mientras duren las vacaciones. «Hemos hecho la base aquí, pero queremos ir también hacia la frontera, a Hondarribia, que nos han dicho también que es muy linda. Y el sábado nos acercaremos a San Juan de Gaztelugatxe, que es donde rodaron la serie Juego de Tronos. El domingo ya nos toca regresar de vuelta», explicaba ella.

También de Madrid han recalado este jueves en Donostia el grupo de amigas compuesto por Celia, Inés y Margarita, junto a la bilbaina Maite que ha hecho las veces de anfitriona a este lado de la autopista. «Llegamos ayer y nos quedamos hasta el domingo. Pero nos estaremos moviendo de aquí para allí. También queremos visitar otros pueblos como Zumaia o Getaria», recalcaban mientras se sacaban una selfie junto a la barandilla de La Concha, muy concurrida durante toda la jornada. «Bueno, también hemos venido para comer pintxos y beber txakoli», añadía Inés, que veranea en San Sebastián todos los años.

A escasos metros, una familia compuesta por ocho miembros pide a uno de los transeúntes de la zona que les saque una foto con la Isla Santa Clara de fondo. El acento les delata. Llegan desde la ciudad que vio nacer a la más grande, Chipiona (Cádiz), aunque solo estarán unas horas por Donostia. «Hace dos días llegamos a Bilbao, donde dormimos, y estamos recorriendo el norte. Ahora comeremos algo por aquí y de vuelta al hotel pasaremos primero por Getaria, Zumaia y Gernika», explican Alejandra, Jesús, Cristina, Paula, Filo, David, Pepa y Jesús.

Para muchos de ellos es la primera vez que pisan la capital de Gipuzkoa. «Tenía muchas ganas de venir y me está gustando mucho. Dicen que se come de maravilla y la ciudad está muy limpia», reconoce Alejandra. Aunque lo que más clebera esta familia gaditana es la meteorología. «Llevamos una semana mirando el tiempo y por fortuna está respetando. De donde venimos nosotros está lloviendo ahora y han tenido que suspender un montón de procesiones, aunque también nos hace falta mucha agua. Pero nos da igual el tiempo, si llueve que llueva, venimos a disfrutar», admite David.

Llegados de mucho más lejos inmortalizaban la playa de La Concha la familia formada por Vibeke, Jan-Ove y las pequeñas Olivia y Hannah. Son de Noruega, aunque actualmente tienen su residencia habitual en Alicante, desde donde se han desplazado a Gipuzkoa en su caravana para pasar las vacaciones de Semana Santa. «Nos habían dicho que este era uno de los mejores lugares de Europa, y es verdad. Nos está gustando mucho», apuntaba la madre. «Además, es uno de los sitios donde más estrellas Michelin hay. Yo ya le he mandado un mensaje a mi madre para volver con toda la familia en verano, cuando haga más calor», añadía él.

Se acerca la hora de comer y los bares y restaurantes de la Parte Vieja donostiarra comienzan a coger color. En el Paco Bueno de la calle Mayor los camareros no dan a basto para sacar tantas gambas a la gabardina. Lo propio hacen en el Gandaria con la gilda. Las pocas mesas de fuera que hay en Casa Vergara o Casa Alcalde, junto a la basílica de Santa María, comienzar a estar codiciadas. En una de este último local de hostelería descansan dos parejas gallegas tras meterse entre pecho y espalda varios kilómetros en la carretera.

Salieron a la mañana desde Santiago y su destino final es Biarritz, al otro lado de la muga. Pero la parada por el camino en San Sebastián para coger fuerzas era «obligatoria», admiten Adrián, Raquel, David y Fabiola mientras apuran sus vermús y cervezas. «Vamos a estar poquitas horas, parar un rato para comer y volver al coche, pero teníamos ganas de conocer esta zona del País Vasco. Ya hemos estado en Bilbao y otros sitios, pero nos faltaba San Sebastián. Tendremos que volver en otra ocasión con más tiempo», aseguraban.

Entre tanto, Gipuzkoa se prepara para recibir a partir de mañana al grueso de turistas que han decidido pasar sus vacaciones de Semana Santa en el territorio. Los hoteles guipuzcoanos auguran un periodo vacacional «positivo» y prevén alcanzar hasta un 90% de ocupación estos días pese a la previsión de lluvia y mal tiempo anunciado para estas jornadas.

Más allá de los visitantes nacionales, principalmente venidos de Cataluña, Madrid y de otros puntos de Euskadi o Navarra, San Sebastián será el destino de miles de franceses que este fin de semana cruzarán la muga para presenciar en la capital guipuzcoana el domingo por la noche el partido de rugby que el Aviron Bayonnais disputará en Anoeta frente al Toulon, correspondiente al Top14, la considerada mejor liga del mundo.